
La muestra repasa en el Obelisco la trayectoria del centro en sus bodas de oro
22 ago 2022 . Actualizado a las 22:15 h.«Maravillosa». Así describe un coruñés la exposición que recoge los 50 años de historia del Chuac en el Obelisco mediante noticias que pasan del blanco y negro al color. El hombre resalta «la importancia del papel de las mujeres en la ciencia», tal y como ilustra uno de los 50 paneles que hace referencia a la plantilla femenina (más del 60 %) del Instituto de Investigación Biomédica de A Coruña (Inibic), creado en el 2008. Así, a lo largo de 13 estructuras, los ciudadanos pueden recorrer la trayectoria del hospital desde su nacimiento en 1972, hasta sus mayores hitos, como el del primer trasplante de médula ósea en 1992; pasando por el temor y la incertidumbre ante el estallido del covid en el 2020, ilustrada mediante un colaje realizado con las miradas de los sanitarios; hasta la impresión de corazones 3D de prematuros para practicar casos reales desde este año.
Vidas rescatadas
Entre los que visitaron ayer la muestra, disponible hasta el 4 de septiembre, algunos subrayaron la importancia de que «los más jóvenes conozcan los avances conseguidos». El paseo repasa también la activación del resto de centros que configuran la red sanitaria coruñesa, como la inauguración del Hospital Teresa Herrera, en 1985, o la transferencia del Marítimo de Oza, dos años después. En esa década, en 1981, se realizó además el primer trasplante de riñón en Galicia. «No he pasado en ningún momento angustia porque tenía absoluta confianza en los médicos», dijo tras la intervención. Andrés López. Una confianza en los sanitarios que continuó creciendo de la mano de la puesta en marcha de importantes servicios para la ciudadanía como la hospitalización a domicilio, la unidad de lesiones medulares o la creación del servicio de cirugía cardíaca, con una primera operación que duró más de cinco horas para implantar tres baipás a un coruñés de 68 años. Debido a su implantación se consiguió aliviar el traslado de pacientes a Madrid o Santander y fue el Chuac el que se convirtió después en centro de peregrinaje, en este caso de enfermos para someterse a tratamientos de embolización.
A Coruña se erigió como ciudad sanitaria y también fue pionera en el tratamiento de quemaduras con la creación de un Banco de Piel en el materno, en 1988. Ese año también se anunciaron dos programas vitales en el Teresa Herrera, el de fertilización in vitro y el de congelación de córneas en el Chuac. Cinco años después, en 1991, tuvo lugar otro de los hitos del Chuac, el primer trasplante cardíaco a un motorista vallisoletano de 22 años. En 1994 se inauguró el programa de trasplante hepático, en 1991 se iniciaron los de páncreas y un año después se realizó el primero de médula en Galicia. Así, en el 2015 el hospital alcanzó la cifra de 5.000 vidas rescatadas.
El nuevo hospital, un paso más para mantener la salud de la comarca otro medio siglo
La exposición que conmemora el aniversario de un hospital que supuso la puesta en marcha de la primera residencia sanitaria en Galicia, y que se ha convertido en una de las señas de identidad de la política sanitaria gallega, finaliza con la explicación del proyecto de ampliación del complejo. Cuando se inauguró el Chuac, premiado como el mejor hospital de España tres años seguidos, A Coruña no llegaba a los 190.000 habitantes, pero con la explosión demográfica a través de los concellos del área metropolitana se reforzaron las infraestructuras sanitarias para que actualmente el complejo pueda prestar asistencia a medio millón de vecinos. Mediante la construcción del Novo Chuac se pretende dar respuesta al incremento de necesidades asistenciales, docentes y de investigación durante otro medio siglo más.
Con 430 millones de inversión autonómica y la colaboración del Ayuntamiento, que aporta una parcela y 26 millones de euros para las expropiaciones y la construcción del centro, el futuro complejo sanitario público integrará alta tecnología y dará más peso a la atención ambulatoria a través de la cirugía sin ingreso, los hospitales de día y las unidades multidisciplinares. El proyecto estará terminado en el 2025 y supondrá pasar de 85.000 a 255.000 metros cuadrados de superficie construida en la ladera de As Xubias de Arriba. Cuando esté finalizado, habrá un 15 % más de camas, hasta las 1.500, un 50 % más de habitaciones individuales, y un 108 % más de puestos de Urgencias. Asimismo, el hospital tendrá 500 consultas externas, 40 quirófanos, 230 puestos en hospitales de día y 45 estaciones de diálisis.