El anterior contrato había finalizado en enero del 2019, aún bajo el gobierno de la Marea Atlántica, que se había comprometido a «municipalizar» el servicio.
Con ese fin, el anterior gobierno encargó a la Empresa Municipal de Viviendas, Servicios y Actividades (EMVSA) la gestión de las bibliotecas. El consejo de administración de la entidad rechazó el plan. El anterior gobierno pasó a licitar el contrato, pero lo tramitó de forma irregular, mediante el sistema de negociado sin publicidad, y el Tribunal Administrativo de Contratación de Galicia anuló el proceso. Ante esa decisión, el actual gobierno local anuló el encargo a EMVSA y tramitó un nuevo contrato.