Los gestores de La Terraza de Sada venden piezas de coleccionismo para rehabilitarla
A CORUÑA
Buscan fondos mediante productos que incorporan la imagen del BIC
28 may 2022 . Actualizado a las 16:21 h.La Terraza de Sada tiene merchandising, pero no solo eso, es posible adquirir elementos únicos ligados a este monumento singular, «un caso único de conservación entre os inmobles modernistas desta tipoloxía e función, de asueto e lecer, na comunidade autónoma», como se reconocía cuando se declaró hace dos años como bien de interés cultural (BIC). Los encargados de gestionarla sacan ahora a la venta piezas del pasado para recaudar fondos para mantener un edificio sobre el que hay consenso en que requiere una rehabilitación integral.
Antonio Fariña explica que utilizan los derechos sobre la imagen del inmueble para vender desde posavasos a camisetas o tazas, pero también piezas de coleccionismo que irán poniendo a la venta poco a poco. «Imos ir tirando dos recursos que temos», explica, remarcando que se ponen a la venta invitaciones antiguas, dípticos con dibujos de Nacho Salorio o botellas de brandi de los años treinta. «Está aparecendo xente que quere coleccionismo e imos poñer máis pezas antigas á venda», avanza Fariña.
Comenta que hasta el momento no habían utilizado los derechos de imagen del edificio, pero creen que ahora es necesario para «un bo fin», y reconoce que han quedado sorprendidos con la respuesta del público desde que comenzaron a vender esta semana tanto en el propio inmueble como a través de la web. «Cando chegue o verán penso que se vai a acelerar», estima, asegurando que la venta de productos es solo una de las líneas que manejan para dar visibilidad a La Terraza y lograr su restauración.
Entienden que debido al estado del quiosco sería necesaria una rehabilitación integral empezando por la cubierta, pero avanzan que con esta iniciativa realmente lo que buscan es no quedarse parados mientras se resuelve el futuro de la concesión. En este sentido, barajan solicitar fondos europeos para llevar a cabo los trabajos, pero reconocen que ya lo intentaron con anterioridad, pero en su día, cuando gobernaba el BNG en el Concello, no lograron el respaldo municipal, que se consiguió posteriormente, pero fuera de plazo.
La familia que regenta el inmueble es heredera de Manuel Zapata, quien compró La Terraza junto con Hipólito Suárez, abuelo de Adolfo Suárez, y la trasladó de A Coruña a Sada en 1921. Reclama una prórroga para continuar gestionando este patrimonio, pero en una contestación reciente al BNG en el Congreso, el Gobierno indicaba que al caducar la concesión en el 2018 «sitúa en estos momentos al Estado como titular del bien»,
Por su parte, el Concello de Sada ha pedido la desafectación del dominio público del suelo donde se asienta y su concesión. Su apuesta es gestionarla y ha reservado una partida de 25.000 euros para la elaboración del plan director de La Terraza, ya que estima que es urgente actuar sobre este BIC.
«A sentenza do Supremo danos esperanza sobre a concesión»
Antonio Fariña califica de «demoledora» una última sentencia del Tribunal Supremo sobre la posible prórroga de una autorización en terreno marítimo-terrestre, que también avalaría la permanencia de Ence en Pontevedra, y explica que les da «esperanza sobre a concesión». Estima que serviría de base para su demanda para continuar gestionando este BIC. La concesión de La Terraza caducó en el 2018, pero para Fariña la Abogacía del Estado basa «erróneamente» su interpretación en la Ley de Patrimonio, en vez de hacerlo en la de Costas. «Temos cinco informes favorables, de Patrimonio, de Costas, da Avogacía do Estado, e pedimos a prórroga, pero despois a Avogacía votou en contra», explica, remarcando que están a la espera de la respuesta a un recurso administrativo.
Xosé Lois Martínez: «A declaración BIC obriga a Administración pública a asumir as súas responsabilidades»
Los arquitectos Xosé Lois Martínez y Arturo López de la Osa hicieron en 1975 una exposición centrada en La Terraza y desde ese momento llevan reivindicando su conservación. Sin embargo, las actuaciones en el inmueble desde entonces han sido pocas y algunas cuestionables. Ambos realizaron iniciativas e informes para lograr la protección del edificio, pero Martínez evita decir qué sería lo más urgente acometer en estos momentos: «O único que podo dicir é que prioritario asumir como Administracións públicas a declaración de ben de interese cultural». «A Terraza, o seu mantemento, conservación, a súa supervivencia caía sobre os propietarios, era unha responsabilidade única. O concesionario cumpriu as súas responsabilidades nos últimos cen anos, ou non? Chegou enteira, aínda que deteriorada, evidentemente. Se cadra o deterioro tivo que ver cun vieiro a tres metros da porta e co tráfico que saíu durante décadas do porto de Sada», en alusión a la principal avenida del núcleo sadense, que señala como uno de los peligros que afectan al monumento.
«A declaración BIC obriga a Administración pública a asumir as súas responsabilidades», remarca Martínez.
«Alguén está xogando perigosamente cunha actitude que é de inhibición, por parte da Administración pública, e falo primeiro do Estado central, pero tamén da Xunta, que é a máxima responsable, e a Deputación e o Concello. As tres Administracións dá a sensación de que non teñen lido o que significa ter declarado BIC a Terraza de Sada», estimó.
Martínez indica que por el momento solo los particulares que la gestionan mostraron interés por proteger el edificio, «non sabemos de ninguén máis, o resto son declaracións». Apostilló que no pasa eso con bienes de la Iglesia declarados BIC o con otros monumentos en manos privadas, en donde no se cuestiona su propiedad para ofrecer ayudas.
