La huelga del metal colapsa Alfonso Molina, en A Coruña

Ana González Núñez
Ana González A CORUÑA

A CORUÑA

Trabajadores de toda la provincia protestan por un convenio digno en el tercer día de concentraciones. Aseguran que la patronal no ha movido su postura

23 may 2022 . Actualizado a las 18:23 h.

Los trabajadores del sector del metal acrecentaron sus protestas este miércoles, el tercer día de la huelga convocada este mes por un convenio digno. Las dos primeras jornadas fueron el 5 y el 12 de mayo y la última será este jueves, que se desarrollará con piquetes en los polígonos.

La marcha de ayer comenzó a las 12.30 en la glorieta de Santa Cristina (Oleiros), donde los participantes llegados de toda la provincia —1.400, según la Policía Local de A Coruña— cortaron el tráfico y se dirigieron a A Pasaxe. Los carriles de entrada a la ciudad por la avenida de Alfonso Molina estuvieron cortados durante más de una hora, lo que provocó importantes retenciones.

Finalizaron en la plaza de Luís Seoane, ante la sede de la Confederación de Empresarios de A Coruña, cerca de las dos de la tarde. Allí, los asistentes se distribuyeron frente al edificio al grito de «Patronal escoita, estamos en loita». Representantes de CC. OO., UGT y CIG indicaron que «non hai ningún tipo de contacto coa patronal». Si la negociación continúa «paralizada» convocarán más días de huelga. Mañana se reunirán los sindicatos participantes en la mesa para decidir las siguientes actuaciones de presión.

«La vida sigue para arriba, pero los sueldos van para abajo»

Trabajadores de las áreas de Santiago y Ferrolterra llegaron en once autobuses y en sus coches particulares para sumarse a las reivindicaciones de los empleados del metal de A Coruña.

«El convenio está paralizado desde el año 2019 y lo quieren dejar así hasta el 2026», condena Javier Santos, un trabajador de una empresa de montajes eléctricos de Culleredo. Explica que cuando comenzó la pandemia se llegó al acuerdo de que se estudiaría un nuevo documento una vez que pasara lo peor. «Aprovecharon la situación y quieren seguir dejándolo así porque les da la gana», reprocha el empleado.

«Si no nos suben el sueldo desde el 2019 y los precios se incrementan, cada año perdemos mucho nivel adquisitivo, cobramos menos», remarca Javier Santos. Otra de las reclamaciones de los sindicatos es el reconocimiento del derecho a la subrogación para toda la plantilla del sector. «Si a la compañía se le acaba el contrato por lo que sea no tiene la culpa el trabajador», argumenta Santos.

Antes de la manifestación, sobre las 10.00, el piquete cerró los concesionarios de Perillo (Oleiros). «Valoramos a folga como un éxito porque estamos mantendo a tensión», dijo Eduardo Caamaño, representante de la CIG en la mesa de negociación.