¿Cómo queda la circulación en la plaza de Lugo, en A Coruña, tras la nueva fase de las obras para humanizar la zona?

La calle Padre Feijoo se reabrió este martes al tráfico después de una semana cortada por obras de canalización de pluviales y saneamiento, pero su apertura no supuso la vuelta a la normalidad circulatoria, ya que un nuevo cierre, esta vez en el tramo vecino que transcurre a continuación de la calle Compostela por el lateral de la plaza de Lugo, provocó un atasco de tráfico durante buena parte de la mañana. La actuación que se inició sobre las 10.15 horas es la continuación del plan de peatonalización definitiva y humanización de la zona, que se inició en febrero en la calle Compostela y que continuó la pasada semana con la intervención en Padre Feijoo. A diferencia de esta, que se resolvió en menos de una semana, está previsto que estos trabajos se alarguen durante dos meses, hasta junio. Cuando se termine esta parte se iniciará la última obra de este proyecto, en la calle Ferrol —entre Padre Feijoo y la plaza de Galicia—. La actuación es a su vez la fase 0 de la gran reforma prevista para los Cantones.

Cuando las máquinas se pusieron en marcha para iniciar los trabajos de la primera parte, el jefe de la obra, Carlos Cortón, ya advirtió en los micrófonos del programa Voces de A Coruña, de Radio Voz, que lo más complicado sería «compatibilizar las obras con el tráfico». Y no se equivocó. Muchos conductores no se percataron de las señales de prohibido el paso —sí se permite el acceso a los garajes— que se instalaron al inicio de la calle Picavia y también en el giro desde Linares Rivas hacia la plaza de Lugo y se encontraron en un callejón sin salida. Para salir del atolladero, tocó maniobrar y eso entorpeció el tráfico.

Las alternativas

Para evitar estos incidentes, la Policía Local de A Coruña indica que sí se permite circular por el túnel para acceder al párking de la plaza de Lugo, por Picavia, y continuar hasta salir en Payo Gómez. Otra alternativa, si se quiere ir a Juan Flórez, es ir por Federico Tapia. Este vial también serviría para llegar a Padre Feijoo, siguiendo por Rosalía de Castro y girando en Betanzos. La nueva ubicación provisional para la carga y descarga se trasladó al margen izquierdo de la calle Ferrol y se eliminan dos plazas de aparcamiento que hay en ese lado de la calzada antes de la entrada al túnel de Picavia.

Las tres caras del proyecto

La humanización impulsada por el actual gobierno local en esta céntrica zona se divide en tres tramos: entre plaza de Mina y Picavia se gana completamente para el peatón toda la superficie de la calle. El pavimento será de granito. Entre Picavia y Padre Feijoo se mantendrá un carril de circulación ejecutado en adoquín de piedra en el sentido actual. En calle Ferrol, entre Padre Feijoo y la plaza de Galicia, se suprimen las zonas de estacionamiento en la acera de impares, manteniendo un único carril de circulación en hormigón y una zona de aparcamiento y carga y descarga en la zona de pares.

Además, la calle Compostela, peatonalizada de forma provisional desde la Navidad del 2019, se transformará en un paseo arbolado con la plantación de 20 tilos, jardineras y bancos, en el que los transeúntes tendrán prioridad, aunque habrá circulación reducida con el fin de que continúe la floreciente actividad comercial de la zona

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