El parón de las auxiliares de Repsol en A Coruña obligará a ampliar la parada técnica una semana
A CORUÑA
Responsables de la compañía confirman que la investigación por la muerte del trabajador sigue abierta y «sin plazos» marcados para su conclusión
10 abr 2022 . Actualizado a las 21:31 h.El parón que la semana pasada protagonizaron los empleados de las empresas auxiliares que trabajan para Repsol supondrá ampliar los plazos previstos en la parada técnica para poner a punto las instalaciones de la refinería de A Coruña. Los trabajos comenzaron el pasado 10 de marzo y estaba previsto que se desarrollasen durante cinco semanas, es decir, hasta los días festivos de la Semana Santa. Sin embargo, el calendario ha tenido que modificarse y lo más probable es que la parada programada dure otra semana más. En todo caso, todo dependerá del ritmo con el que se logre avanzar en las tareas.
Por otro lado, portavoces de la multinacional confirmaron que la comisión que investiga el accidente laboral ocurrido el 26 de marzo, en el que falleció Unai Martínez, de 35 años, y resultó herido Óscar Feal (ambos empleados de Nervión Industries), continúa «trabajando con rigor e sin descanso» para poder esclarecer lo ocurrido. Aunque inicialmente los trabajadores y enlaces sindicales de las subcontratas exigían saber cuanto antes los resultados de dicha investigación, desde la empresa indicaron que es una labor delicada, que precisa tiempo y en la que también está implicada la autoridad judicial. Por lo tanto, «no se van a dar plazos para tener una conclusión», indicaron. E insistieron en que se emitirá un informe completo, pero la comisión de investigación «tardará lo que tenga que tardar» en recopilar todos los datos y completar la documentación. Esa comisión interna está conformada por técnicos especialistas de distintas áreas de la refinería y representantes sindicales de los trabajadores de CIG, CC.OO., UGT, STR, y USO.
El accidente del pasado sábado 26 de marzo generó un enorme malestar entre los empleados de las subcontratas que derivaron en protestas y un parón de los trabajadores, que exigían mejoras en las condiciones laborales y de seguridad dentro de la refinería. Se celebraron numerosas asambleas y durante varios días los operarios se negaron a entrar a trabajar si la empresa no aceptaba sus condiciones. Tras una semana de mucha tensión, el viernes 1 de abril se llegó a un acuerdo y al siguiente lunes todos volvieron a sus puestos de trabajo, condicionado, eso sí, al cumplimiento de una serie de medidas por parte de Repsol. En este sentido, la multinacional confirmó que se admitieron las propuestas que refuerzan las medidas de seguridad que ya existían en la planta coruñesa. En concreto, la comisión de seguridad y salud intercontratas, que habitualmente se reunía cada semestre, tendrá encuentros semanales durante el período de paradas técnicas programadas, con la participación de Repsol. Desde Repsol puntualizaron que los técnicos de prevención de las empresas contratistas mantienen reuniones semanales con las empresas auxiliares durante todo el año (y diarias en parada). También ya está en marcha la presencia de una ambulancia totalmente dotada y de personal médico durante las 24 horas al día, de lunes a domingos, para las paradas técnicas. «Repsol ya contaba con ambulancia y una clínica con presencia de personal médico en jornada ordinaria de ocho horas, de lunes a viernes. Estas medidas refuerzan el servicio sanitario existente», aclararon.
