Una concentración en la plaza de Pontevedra nacida de la indignación de una vecina denuncia los desmanes de la banca y reclama respeto hacia las personas más vulnerables
03 abr 2022 . Actualizado a las 21:02 h.
El testimonio en O Novo Normal de Mary Barros, una jubilada coruñesa «acribillada» por las comisiones bancarias y la reducción del horario de atención al cliente, germinó ayer en una protesta en la plaza de Pontevedra organizada en la calles y las redes sociales. Pidieron una banca «con función social e non só comercial, que pense nas necesidades das persoas máis vulnerables».
El día 22 de febrero, en una página creada por Javier Quiroga al principio de la pandemia en la que decenas de vecinos han ido contando sus historias, Mary Barros comentaba que después de toda una vida sin necesitar una cuenta corriente, tuvo que abrir una para cobrar la jubilación y últimamente empezó a sentirse machacada por las comisiones.
El testimonio tuvo una repercusión importante en las redes sociales. Fue visto por 75.000 personas y compartido por 892.427 en Facebook e Instagram. «A raíz desta publicación, a Mary empezaron a parala veciños a diario pola rúa. Felicitábana, comentábanlle as súas experiencias particulares, e moitos de eles lle facían unha pregunta: ‘Que podemos facer, Mary?'», apunta Javier Quiroga, y concluye: «Por iso nos reunimos».