El conflicto de la basura deja calles sucias y contenedores quemados en A Coruña
A CORUÑA
El Ayuntamiento ordenó paralizar el servicio al producirse sabotajes por segundo día
25 feb 2022 . Actualizado a las 08:28 h.La segunda madrugada consecutiva de incidentes alrededor de la recogida de basura se saldó con al menos seis contenedores incendiados, multitud de ellos volcados y toneladas de basuras en las calles amontonadas en torno a los recipientes en los que se depositan.
Como sucedió durante la primera jornada el servicio se puso en marcha alrededor de la medianoche, pero a la 1.30 horas recibieron una orden de paralizar su actividad y los vehículos, incluidos algunos que iban acompañados de coches de la Policía Local, volvieron a la base salvo cuatro averiados que permanecieron en la vía pública. Esta decisión transmitida por el Ayuntamiento se tomó «por seguridad» y para que se pudiese desarrollar «con garantías» después de que los bomberos tuviesen que realizar múltiples salidas ante los avisos de contenedores en llamas en diversos puntos de la ciudad como la avenida de Hércules, Labañou, Fernando Rey, As Atochas y Félix Acevedo, todos entre las 00.20 y las 2.45 horas.
Lo sucedido en la pasada madrugada, igual que los daños en 23 camiones con ruedas pinchadas y cristales rotos de la noche anterior, fue puesto en conocimiento de la policía y desde el gobierno municipal esperan «que los autores sean identificados y castigados por atentar contra un servicio público esencial». Los problemas nocturnos tuvieron su repercusión directa durante el día, ya que en todos los barrios de la ciudad era posible ver montones de basura acumulada en contenedores desbordados y con los residuos en muchos casos ocupando aceras y parte de la calzada en los casos en los que se volcaron los contenedores.
Negociaciones laborales
El sabotaje y los actos vandálicos sufridos por los camiones y los contenedores se producen de manera simultánea con las negociaciones de índole laboral que se están llevando a cabo tanto en el servicio de recogida de basura como en el de limpieza viaria. Estos dos contratos son los más costosos para las arcas municipales y suponen 11,6 y 14 millones de euros anuales y entraron en vigor hace 12 y 16 meses, respectivamente, con una duración de 8 años cada uno.
En el caso del primero desde el comité de empresa señalan que se está en «negociaciones, pero no en conflicto» con la empresa adjudicataria por «vulneración de derechos fundamentales e incumplimiento del convenio colectivo», cuyo vencimiento fijan en el 2019. PreZero, la adjudicataria, aseguró ayer que el año pasado se firmó un nuevo acuerdo laboral «suscrito con los agentes sociales» y que está «de plena vigencia».
El Sindicato de Trabajadores de la Limpieza (STL) emitió ayer un comunicado en el que hace referencia a los hechos y señalan que acumulan «más de tres años con constantes averías e incidencias diarias» en los camiones de recogida, que serán reemplazados en los próximos meses por otros nuevos. «Ya deberían haber implantando los nuevos vehículos», aseguran desde STL. Mientras, en el caso del servicio de la limpieza viaria los problemas se centran en la revisión de las actualizaciones salariales en torno al IPC. Fuentes conocedoras de las diferencias entre empresa y trabajadores aseguran que la primera ofrece un incremento del 0,5 %, mientras que la plantilla solicita que sea del 6,5 %.
La previsión para la pasada madrugada era que «la empresa de recogida saldrá a hacer su trabajo con las medidas de seguridad que considere, y dispondrá de un dispositivo especial para trabajar durante el día», explicaron desde el Ayuntamiento, que recuerda que la policía está al tanto de la situación.
La empresa teme por los empleados y el comité se desvincula de los actos vandálicos
PreZero, la empresa encargada de la recogida de residuos, anunció ayer que había denunciado ante la Policía Nacional «los graves actos de vandalismo y sabotaje que está sufriendo tanto el personal como la maquinaria». La entidad lamentó que los hechos «pongan en grave riesgo a los empleados de la plantilla, así como el enorme perjuicio que están causando a la ciudadanía».
Los actos vandálicos de estas madrugadas fueron condenados desde diversos sectores, como el comité de empresa. «Denunciamos los actos vandálicos y estamos con desconfianza por el temor a sufrir lesiones físicas», explicó Luis Varela, presidente, quien apuntó que «nosotros no somos y no sé quién está detrás de todo esto», además de esperar que la orden de paralizar el servicio fuese por «preservar la integridad física de los empleados, pero si es por los daños que puedan sufrir los camiones es que algo pasa». Esta postura fue compartida por Miguel Ángel Sánchez, secretario general del sindicato STL, quien expuso que quieren «colaborar en todo momento con cualquier ente u organismo para poder aportar cualquier tipo de solución».
El gobierno local mostró de nuevo su rechazo a lo sucedido y la subdelegada del Gobierno, María Rivas, explicó que esperan que la situación se «solvente lo antes posible», que están «en permanente comunicación» con el consistorio coruñés y que la Policía Nacional está «trabajando conjuntamente con la Policía Local para darles todo el soporte que nos han pedido». Además, el PP local instó al gobierno local a «tomar medidas para asegurar la recogida y a explicar a los coruñeses lo que sucede».