
El proyecto «Dámoslle unha vota á terra?», del CEIP San Marcos, ganó un concurso nacional del Ministerio de Educación en la categoría de tecnologías aplicadas
09 dic 2021 . Actualizado a las 21:37 h.El CEIP San Marcos acaba de ser premiado. Ha ganado el Concurso Nacional de Buenas Prácticas del Ministerio de Educación en la categoría de Uso y aplicación de las tecnologías aplicadas a la educación por el proyecto Dámoslle una volta á terra?, de carácter multidisciplinar, en el que se implicó todo el centro.
Llegaron a este galardón con una apuesta en este campo desde hace dos décadas. En este colegio, desde el curso 2001-2002, se apostó por las nuevas tecnologías impartiendo de manera voluntaria por parte de un profesor del centro clase de informática a todo el alumnado de infantil y primaria. En el 2008 recibieron por parte del Concello ordenadores para dotar el aula de Informática y se integraron en el proyecto Abalar, para quinto y sexto, que completaron posteriormente con un proyecto experimental de libro digital. Actualmente, en el CEIP San Marcos cuentan con Abalar Móbil y trabajan dentro del proyecto Biblioteca Creativa aspectos relacionados con la robótica, la realidad aumentada, la impresión 3D y los espacios makers.
No es el primer premio que recibe el centro, ya que cuenta con el galardón Wisibilízalas de la Universidad Pompeu Fabra.

«Las nuevas tecnologías no están en este proyecto como algo novedoso, sino como un recurso a través del que se desarrollan las actividades del proyecto. Por ejemplo las entrevistas a los grupos de música se realizaron a través de la radio escolar, se tuvieron que editar en un programa informático y subir a una plataforma, y todo lo realiza el alumno y es trabajo de conocimientos en nuevas tecnologías», explican desde el centro de un proyecto que giró sobre la Tierra. «En todos los cursos realizamos talleres de robótica y nos sirve para trabajar distintos tipos de contenido, a la par que un niño aprende a programar una placa base trabajamos matemáticas, ciencias sociales o cualquier otra temática en la que estemos interesados, el año pasado tuvieron que poner placas a sus inventos para abordar las energías alternativas», indican.
«Los niños hacen presentaciones a través de aplicaciones, disponen de cuentas de correo para relacionarse y algunos alumnos llevaron a cabo los guiones y grabaciones para elaborar vídeos», precisan, remarcando que el objetivo es que «el alumnado utilice las nuevas tecnologías para el aprendizaje y como recurso del cual echar mano tanto para construir aprendizaje como para transmitirlo». Se busca que estén preparados para un mundo cada vez más tecnológico, pero siendo conscientes de sus riesgos.
