Un taller de cine en A Coruña para explorar la creatividad de los mayores

Melissa Orozco / C.A A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Los participantes en uno de los talleres sobre cine, teatro y música.
Los participantes en uno de los talleres sobre cine, teatro y música. Cedida

El proyecto De Mayor Crea lleva cuatro años en la ciudad

18 nov 2021 . Actualizado a las 09:54 h.

Cinco señores posan sobre las tablas de un auditorio que hace las veces de una taberna. Improvisan y cuentan sus mejores ocurrencias que se convertirán en una obra de teatro a vísperas de estrenarse en diciembre. Algunos no se conocían, incluso pensaban que no tenían talento para actuar pero el hecho de cultivar su creatividad fue el mejor aliciente para que participaran en los talleres formativos de De Mayor Crea. Una iniciativa que comenzó hace cuatro años en la ciudad para los mayores de 50 años.

El proyecto será presentado mañana en la Fundación Luis Seoane a las 11.30 horas y luego se dará una charla sobre envejecimiento activo. Los talleres exploran los lenguajes cinematográficos, teatrales y musicales. Cada participante aporta sus historias al principio, luego, dividen las funciones de acuerdo a su gusto. En las clases nacen productores, actores, editores, compositores, intérpretes, camarógrafos y escritores que ven en el arte un nuevo camino para pasar la edad adulta.

De acuerdo con los coordinadores del proyecto Manolo Gómez y Domingo Días, participan cerca de 50 personas en los centros cívicos de Os Mallos, O Castrillón, el Fórum Metropolitano y la fundación. El aprendizaje es sobre la marcha, los integrantes desarrollan un cortometraje, una obra de teatro o una composición en una semana.

«El cine, el teatro y la música son actividades que se hacen en grupo y se integran toda clase de habilidades. Queremos que los participantes vivan una experiencia participativa e inmersiva. Este proyecto pretende cambiar el paradigma de hacer cosas con mayores para que ellos sean los protagonistas y descubran facetas que no conocían de sí mismos», afirma Manolo.

Isabel López tiene 69 años, es una de las participantes y actrices de los talleres desde sus inicios. Los números ocuparon una parte importante de su vida, pero asegura que siempre ha tenido una vena artística. Lo corroboró cuando conoció De Mayor Crea e interpretó sus primeros papeles. «Aprendí a soltarme cuando vine aquí, me gusta mucho el teatro pero soy tímida. Cuando yo estoy en el escenario, me olvido de la gente. Me meto en el papel. El tiempo que paso aquí es una maravilla porque el grupo es muy unido. Estuve en un proceso de quimioterapia, cuando lo terminaba venía a ensayar, me entretenía mucho, entendí que no hay que encerrarse en uno mismo», dice.

Una de las participantes nueva, María Aurora Fernández, de 67, llegó al taller por azar esta semana. No lo pensó dos veces para venir, resultó una novedad para ella. «No me esperaba esto, toda mi vida fui vendedora y trabajé con el público. Pero sí me puse un poco nerviosa al estar en el teatro porque mis compañeros lo hacen muy bien», cuenta

Combatir el edadismo

«Hasta hace poco estuve en activo. Perdí esa dinámica de ir a trabajar, madrugar, estar siempre con gente. Desde que me jubilé, noto que nos tratan como si no tuviéramos voz y voto, como si no supiéramos nada, tipo 'eso no es para ti', 'te vas a poner esa ropa de desvergüenza'. Me encuentro con que nos rechazan. Con este taller me siento que mi cabeza es joven y valgo para algo más que estar en casa», comenta María Aurora. La iniciativa ha sido una gran alternativa para frenar el edadismo, es decir, la discriminación por motivo de edad. 

De Mayor Crea hizo un convenio con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para evaluar los cambios de los participantes del proyecto, especialmente, lo que está relacionado con los hábitos, propósitos y el la búsqueda de nuevos horizontes. También desarrollarán proyectos que contribuyan a combatir el edadismo. 

Según Manolo Gómez, la vejez es una etapa muy fértil para desarrollar otras habilidades. Con los talleres, los participantes logran incrementar su autoestima y seguridad. «El edadismo provoca una distancia entre una parte importante de la población y el resto de la sociedad. Esto impide que en la práctica, el colectivo de personas mayores que tienen conocimiento no se animen a participar. Dentro de dos años, los adultos mayores seremos casi la mitad de las personas en Galicia, ¿nos seguirán marginando o viendo como unidad de gasto? Tenemos que intentar convertir eso en una oportunidad», anota.