Reabre la piscina de Riazor, en A Coruña: «Estoy encantado de venir aquí, no he nadado desde que empezó la pandemia»

Melissa Orozco / C.A A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Los usuarios disfrutaron de las instalaciones.
Los usuarios disfrutaron de las instalaciones. CESAR QUIAN

Tras un año y medio cerrada por el covid y por obras en la cubierta, la instalación municipal abrió este lunes para los cursos deportivos

19 oct 2021 . Actualizado a las 10:10 h.

Los chapuzones y las brazadas revivieron la piscina de Riazor que estuvo cerrada por más de un año debido a la pandemia y a reformas en el techo de la instalación. Este lunes fue la reapertura, las escuelas deportivas municipales estrenaron las nuevas reformas. «Esperé mucho a que la abrieran. Estoy encantado de venir aquí, no he nadado desde que empezó la pandemia», dice Camilo Gallego, un adulto mayor que se encuentra en clases de natación. Sin embargo, aún no se acostumbra al uso de mascarilla en el recinto, «ya cuando volví a salir tenía el tapabocas muy mojado», añade.

Su compañera Rosa Liñeiro, que también asiste al curso, no recuerda la última vez que fue a piscina: «Venía cuando era joven, ahora soy mayor», bromea. La usuaria cuenta que disfrutó el regreso a las clases de natación aunque «el agua estuviera fría como siempre».

Los dos nadadores coinciden en la importancia de mantener en uso los espacios para nadar. Camilo asegura que ir a piscina «le viene muy bien» para sus hombros y salud mental. Mientras que Rosa afirma que con los cursos puede hacer más amigos en la ciudad. De acuerdo con el usuario, «a esta edad, que no estás trabajando y a veces no tienes nada que hacer, es muy agradable ir a piscina. Antes de la pandemia, éramos un grupo muy grande, después de las clases, nos íbamos todos a tomar algo y charlábamos».

Rosa Liñeiro y Camilo Gallego, usuarios de la piscina que regresaron a sus clases de natación.
Rosa Liñeiro y Camilo Gallego, usuarios de la piscina que regresaron a sus clases de natación. Melissa Orozco

Ambos usuarios notaron al entrar los cambios en las instalaciones, Camilo recuerda que el techo anterior de la piscina estaba deteriorado y las vigas no eran tan grandes como las nuevas que se colocaron.

Uno de los socorristas, Rubén Gallego, señala que a pesar de que no asistieran muchos usuarios a la reapertura de la instalación, quienes se acercaron a nadar, estaban contentos de regresar. «Siempre hay alguien que tiene miedo de contagiarse de coronavirus en natación. Pero parece que ahora la gente se está animando poco a poco. La gente irá viniendo conforme se vayan enterando de que la piscina ya está abierta», manifiesta.

De momento, las instalaciones solo estarán abiertas para las escuelas deportivas municipales, pero se espera que a final de mes ingresen todos los usuarios.

Las intervenciones

La obra de habilitación en la piscina de Riazor costó más de 250.000 euros, primero se retiró la cubierta anterior y se instaló una nueva con pendiente del 10 % fabricada con panel sándwich sobre una estructura de madera laminada que mantuviera la inclinación hacia la fachada del Frontón. Las ventanas de la fachada sobre las gradas se sustituyeron por otras que tenían madera y aluminio. Los cambios se realizaron en busca de que la piscina contara con mejores condiciones térmicas.

Las intervenciones fueron adjudicadas a Abeconsa y comenzaron a principios de este año. El plazo de ejecución era de dos meses, pero debido a la crisis sanitaria y a las condiciones meteorológicas se alteraron los plazos.

El Concello de la ciudad impulsó la ejecución de las obras que formaban parte del programa «Reactivando Coruña». La obra se planeó después de detectar daños en la cubierta debido a las condiciones ambientales. Algunas de las estructuras metálicas del techo tenían corrosión.

La nueva cubierta cuenta con cinco vigas de madera laminada que están sostenidas sobre los pilares de hormigón por medio de unas chapas de anclaje de acero que dividen el techo en cuatro crujías. Se ubicaron seis vigas secundarias que se separan en cinco cuadrantes. También se colocó un nuevo canalón contra la medianera del Frontón hacia la calle para detectar posibles atascos y evitar condensaciones. Aparte de los cambios estructurales del techo, la piscina cuenta con nuevos equipamientos.