A Coruña se rinde al ruido de Sidecars

Carmen Novo / M.C. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

CESAR QUIAN

La banda madrileña ofreció en María Pita un concierto cargado de estribillos contagiosos y letras intimistas en el que no faltaron, una noche más, palabras en memoria de Samuel

13 ago 2021 . Actualizado a las 00:07 h.

Sidecars hicieron este jueves el ruido suficiente para llenar María Pita. Los 800 asientos distribuidos a lo largo y ancho de la plaza no bastaron para albergar a todos sus seguidores. Muchos de ellos se quedaron de pie tras la valla, donde con vaso de cerveza en mano las medidas de distanciamiento social se vuelven menos taxativas.

Y otros, como Miguel y Alejandra, dos amigos ferrolanos, tuvieron la suerte de encontrar mesa en los bares de alrededor, llenos desde la tarde. «Así lo vemos sentados, como los de dentro», bromeaban. Para amenizar la espera recordaban otros conciertos de la banda. Pero este no era uno más, o por lo menos, no como los de antes.

Juancho, Ruly y Gerbass, las tres partes de Sidecars, aparecieron puntuales en escena, para aprovechar al máximo las dos horas de las que disponían. Su sexto y último disco, Ruido de fondo, se publicó en septiembre de 2020, pero han tenido que esperar hasta ahora para poder presentarlo en directo. Y aunque ha sido un mal año, el combo madrileño se ha marcado alguno de sus mejores temas.

Entre ellos, Golpe de suerte, con el que abrieron el concierto entre luces azules y aplausos cálidos de bienvenida. Entonando un «boas noites, Coruña querida», comenzaron un recital cargado de melodías nostálgicas, estribillos contagiosos y letras románticas e intimistas.

Prosiguieron con canciones como Galaxia, de notas pegadizas y mensaje positivo. Demuestran, una vez más, que las ganas de vivir el momento siguen siendo su mejor fórmula.

Deseando «estar a la altura de las circunstancias», no se olvidaron de tocar algunos de los temas que los catapultaron a la fama, como Fuego cruzado, Todos mis males o Costa da morte. Con ellas, el público se encargó de los coros.

"Como sigan sucediendo cosas como lo que le ocurrió a Samuel, el mundo va a seguir siendo una mierda", reivindicó el cantante.