Juzgan a tres personas por estafar 188.000 euros con el timo del billete tintado

Alberto Mahía A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

CEDIDA

Hicieron creer a la víctima que si le compraban un líquido podría convertir cartulinas negras en billetes de curso legal

26 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Los tres acusados de nacionalidad camerunesa que la próxima semana ocuparán el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial se enfrentan a una pena de 5 años de prisión como supuestos autores de un delito de estafa.

El juicio se hizo esperar, pues los hechos ocurrieron hace nada menos que 16 años. Según el fiscal, cometieron el timo de los billetes tintados, consistente en captar a una persona a la que muestran diversas cartulinas de papel de color negro, haciendo ver que realmente son billetes de curso legal, obtenidos de forma irregular y que han sido tintados con el fin de evitar que pudiesen ser detectados e intervenidos, y que adquieren su estado original tras aplicarle un procedimiento químico.

De esta manera, en agosto del 2005, los acusados contactaron con un coruñés al que dijeron que querían invertir mucho dinero. Uno de ellos se hizo pasar por el hijo del embajador de Costa de Marfil. Supuestamente, convencieron a la víctima de que habían recibido varios millones de euros en concepto de ayuda humanitaria. le hicieron una demostración con un billete de 50 euros y el afectado les entregó 188.000 euros. Esperaba que la cantidad se multiplicara. Pero no. Se la llevaron toda.

Según aparece en el escrito de acusación, los acusados se dirigieron a un bar del barrio coruñés de Matogrande, donde habían quedado con la víctima."Le dijeron que el dinero que tenían era de color negro para evitar posibles robos en su país y que ese color se lo quitaban con unos productos químicos, diciéndole que el los billetes estaban en una maleta en Francia y que para pasar la frontera necesitaban dinero para sobornar a un policía, consiguiendo que la víctima les adelantase 4.600 euros", asegura el Fiscal.

Posteriormente, lo convencieron para que fueran a Madrid unos días más tarde, y tras alojarse en un hotel y tras abrir una maleta que portaban, le enseñaron las cartulinas negras que había en su interior, envueltas en papel transparente cubierta con unos polvos por encima. Le demostraron como con un líquido se transformaban las cartulinas en billetes de 50, 100 y 200 euros, diciéndole que para convertir todo el dinero necesitarían 130.000 euros para poder comprar un litro de reactivo en Francia. Posteriormente, le siguieron pidiendo dinero para poder comprar un segundo componente químico, por lo que la víctima viajó de nuevo a Madrid y entregó otros 25.000 euros, quedando en un hotel de Leganés donde los acusados le entregaron una maleta que contenía supuestamente 25 millones de euros tintados de negro.