Langosteira atrae inversiones aun sin tren

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA

La empresa Galigrain duplicará sus instalaciones en el puerto exterior con 14 millones de euros

04 ene 2021 . Actualizado a las 19:38 h.

Pese a la falta de una infraestructura clave para su desarrollo, el enlace ferroviario, punta Langosteira continúa atrayendo nuevas inversiones. El presidente de la Autoridad Portuaria, Martín Fernández Prado, confirmó este lunes que en el próximo consejo de administración se aprobará la ampliación de la concesión solicitada por la firma Galigrain, del grupo Nogar, que invertirá 14 millones de euros para duplicar sus instalaciones en el puerto exterior.

Con ese gasto, destinado a la construcción de una nueva nave, diversos sistemas auxiliares y un sistema de transporte de grano a la «vanguardia medioambiental», la compañía habrá destinado 27 millones de euros a sus instalaciones en punta Langosteira.

Con la ampliación de Galigrain, el puerto exterior supera los 235 millones de euros en inversiones privadas, señaló el presidente de la Autoridad Portuaria. En total, en punta Langosteira ya están operando siete empresas que suman doce concesiones.

Fernández Prado confirmó la inversión durante una visita a las instalaciones del puerto exterior en compañía del alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo. El presidente del puerto destacó que el objetivo es continuar atrayendo empresas y dando servicio a las que ya operan en el área metropolitana, entre las que destacó las ubicadas en el «potente polígono industrial de Arteixo». En la misma línea, el regidor destacó el papel «eminentemente industrial» de su municipio y reiteró su compromiso de continuar fomentando el crecimiento económico. Tanto Fernández Prado como Calvelo insistieron además en su voluntad de colaborar para impulsar punta Langosteira. De hecho, el presidente de la Autoridad Portuaria destacó el apoyo que la infraestructura siempre ha encontrado en la corporación municipal de Arteixo.

Un voto por el puerto exterior

Fernández Prado consideró la decisión de Galigrain, uno de los principales operadores del puerto coruñés, como un voto de confianza hacia Langosteira: «Creo que es una muestra de que están contentos con el funcionamiento del puerto exterior y de su operatividad». Incluso a pesar de que el Gobierno central sigue sin concretar cuándo iniciará la construcción del enlace ferroviario, que es clave para la viabilidad de la dársena coruñesa.

Fernández Prado recordó que la empresa es una de las que más se han interesado en la construcción de la vía férrea. Sin esa infraestructura, la empresa y otros concesionarios del Puerto de A Coruña se ven obligados a duplicar parte de sus servicios, con instalaciones tanto en los muelles interiores como en Langosteira, lo que incrementa los gastos que afrontan. Por otro lado, la falta del enlace ferroviario también se ha traducido en un aumento de las tasas portuarias, ya que la normativa obliga a calcularlas de acuerdo a los activos de los puertos, y el de A Coruña tiene muchos más que sus competidores inmediatos al no poder liberar los muelles interiores.

Contactos con los concellos

El encuentro entre el presidente del Puerto y el alcalde de Arteixo se enmarca en la ronda de contactos que el primero está manteniendo con los responsables de las distintas Administraciones vinculadas a la gestión portuaria. De hecho, Fernández Prado ya mantuvo una reunión con la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, el 16 de diciembre, unos días después de tomar posesión. El encuentro también terminó con un compromiso de colaboración para intentar desatascar la construcción del enlace ferroviario y una solución para la deuda que afronta el puerto tras las obras para levantar Langosteira.

En ambos casos, la solución pasa por los despachos del Gobierno central y no parece que esté próxima. En los presupuestos del Estado para este año no se incluye una partida suficiente para licitar las obras del enlace ferroviario. Sin ese trámite, o la solicitud de una prórroga, la infraestructura, que tiene proyecto desde el 2018, podría sufrir un grave retraso, ya que en junio caducará el informe de impacto ambiental, que la Administración tardó tres años en elaborar.

El presupuesto tampoco incluye fondos para abordar el problema de la deuda de 300 millones de Langosteira. Sin embargo, sí está previsto un desembolso para pagar los 350 millones de euros pendientes de la remodelación del puerto de Valencia. El Gobierno defiende que la situación es distinta, ya que en Valencia la deuda fue contraída por un consorcio, no por el propio puerto, pero todos los partidos de la oposición coinciden en que se está produciendo un agravio, sobre todo porque Langosteira se proyectó para evitar una catástrofe ecológica tras el naufragio del Prestige, mientras que la deuda de Valencia tenía el fin de celebrar la Copa América de Vela.

La reclamación del enlace ferroviario y de una solución para la deuda han sido respaldadas mediante distintas iniciativas en el pleno y los parlamentos gallego y estatal durante los últimos años, pero la aprobación de esas peticiones no se ha traducido en hechos concretos hasta ahora.