Un total de 125 policías velarán por el «estricto» cumplimiento de las normas
31 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Menuda Nochevieja la que se viene encima. No es que sea muy distinta, porque habrá uvas, un árbol con lucecitas y un menú más caro. Pero por lo demás, será como la de un jueves de febrero. O peor, porque a la mesa no se sentarán más que dos unidades de convivientes. A los amigos y demás familia se les felicitará por WhatsApp y nadie podrá estar en la calle entre la 1.30 y las 6.00 horas. Además, los locales de hostelería estarán cerrados desde las once de esta noche hasta las once de la mañana de Año Nuevo. Por tanto, ni churros ni chocolate. Mucho menos, cenas-baile, fiestas o jolgorios multitudinarios en pisos. Y el que se atreva a saltarse las normas, que se prepare. Habrá más policías que ninguna otra noche del año, quitando la de San Juan, para que nadie se pase de la raya. Por ellos y por los demás. Si alguien está tentado a faltar a la responsabilidad y poner vidas en riesgo, que sepa que ayer aumentaron notablemente los casos activos por covid.
Dispositivo policial. Más de 120 agentes. El Ayuntamiento velará por el buen comportamiento de los ciudadanos. Un total de 113 agentes formarán el dispositivo especial de la Policía Local, que vigilará que nadie ande por la calle durante el toque de queda. A todo eso se sumará la Policía Nacional, que patrullará las calles con varios vehículos. El operativo, según el Ayuntamiento, se fijará especialmente en las zonas de ocio y locales o bajos de todos los barrios. «Hay sospechas» de fiestas clandestinas de grupos de amigos o de «irresponsables» que abrirán sus negocios a escondidas para pasar la noche a puerta cerrada sin ser vistos ni oídos. «Los agentes llevarán los ojos bien abiertos», dicen desde María Pita.
Picaresca. Nada de fiestas multitudinarias en pisos. Para evitar la calle, la policía sabe que hay decenas de reuniones convocadas en pisos o casas con exceso de invitados. Y esperan que las salas del 091 y 092 se colapsen con llamadas de ciudadanos denunciando que su vecino celebra una gran fiesta. Para responder las denuncias -se mantendrá el anonimato- estarán los coches patrullas para acudir a la vivienda y evitar la irresponsabilidad.
Horarios. A la 1.30 en casa y los bares cerrados a las 23.00 horas. Una cosa es que la Xunta permite los desplazamientos en estos días y otra muy distinta es saltarse el toque de queda. Para Nochevieja, está fijado a la 1.30 horas. Y en la calle no se podrá salir hasta las seis de la madrugada.
Comensales. Máximo de diez personas en la mesa. Aunque la Consellería de Sanidade recomienda una Nochevieja entre convivientes, el decreto publicado en el DOG permitirá más unidades de convivientes en la misma mesa. Los límites fijados permiten hasta diez personas en las reuniones de dos unidades de convivientes y de seis adultos en el caso de tres o más unidades, sin que computen para el cálculo los niños menores de 10 años. Eso sí, lo que no se puede superar el es número, que es de diez. Hacer lo contrario va contra la ley.
Hostelería. Cerrada de 23.00 hasta las 11.00 horas del día 1. Bares, cafeterías y demás locales de hostelería mantendrán el horario de cierre decretado por la Xunta. Es decir, que a las 23.00 horas tendrán que estar cerrados. Lo que cambia es la apertura. Si antes podían hacerlo a las seis de la mañana, el día 1 tendrán que esperar hasta las once. Por tanto, nada de cenas-bailes, ir de pubs o discotecas o las tradicionales fiestas en clubes o entidades.
Sanciones. De 100 a 60.000 euros. Cualquier celebración que no se ajuste a las normas será ilegal y los agentes encargados de controlarlas podrán formular propuestas de denuncia, con sanciones a partir de 100 euros, que en los casos más graves pueden llegar a los 60.000 por poner en riesgo la salud pública. La Policía Local impuso 33 denuncias durante la Nochebuena y la Navidad. Diecinueve de ellas fueron por no usar mascarilla. Los agentes también denunciaron a seis establecimientos de hostelería. Y tres personas fueron multadas por fumar sin guardar distancias.
Betanzos. Se espera menos asistentes a la tradicional feria. Es una estampa secular, la de la feria del 1 de enero en Betanzos, con cientos de jóvenes recibiendo el año nuevo. Este viernes, ante las restricciones, no será lo mismo. No obstante, el Ayuntamiento desplegará un dispositivo similar al de ejercicios anteriores. Agentes de la Policía Local y de Protección Civil velarán por el cumplimiento de las normas.