El despido de una trabajadora tensa aún más las relaciones con Grupo Riesgo, al que acusan de «acoso» a la plantilla
16 jun 2021 . Actualizado a las 12:46 h.La plantilla de Alu Ibérica de A Coruña está decidida a mantener una huelga indefinida, «e cun seguimento total», hasta que la dirección de Grupo Riesgo, los terceros dueños de la factoría en un año y medio, readmita a la trabajadora despedida el 17 de diciembre.
La comunicación del despido se hizo coincidiendo con la ausencia del comité, que había acudido a una concentración ante la Delegación del Gobierno, «co que se lle negou o dereito a unha defensa e a expoñer alegacións», denuncia el presidente del comité, Juan Carlos López Corbacho.
Dicho procedimiento ya desencadenó una discusión entre los nuevos directivos y los representantes de los trabajadores con acusaciones, por parte del fondo de inversión, de haber provocado un infarto a un responsable de la planta. Una «calumnia» que el comité de empresa ha puesto en conocimiento de la Justicia. «Levamos todas as inxurias deste grupo non industrial ante o xulgado de garda o día de Noiteboa. Agora temos que amplialas. Non nos deixaron entrar na planta para comprobar o seguimento da folga e exercer os nosos dereitos sindicais. Eu puiden ir un momento ao despacho, pero escoltado», relata Corbacho.
Desde las 06.00 horas de la mañana de ayer el paro está en marcha. El comité insiste en el «acoso» del Grupo Riesgo hacia los trabajadores y sus representantes y recuerda el compromiso de mantener el empleo que se suscribió en la venta de Alcoa a Parter en julio del 2019. «A outros seis empregados tamén os citaron, e retiveron, nun despacho o pasado xoves para que firmasen unha carta que sería a súa sentenza de despido», dice Corbacho.
Armados con un «hacha»
Por su parte, la compañía, que tacha de «ilegal» la huelga, asegura que se produjeron «actos vandálicos» y que un «grupo de encapuchados» quiso entrar en las instalaciones. Iban, relatan desde el gabinete de prensa de Grupo Riesgo, «armados con un hacha» para inutilizar las cámaras de vigilancia y «amedrentar» a los empleados, que, según la dirección, no quieren ir a la huelga.
La dirección de Alu Ibérica considera que estos hechos (una huelga convocada) «impiden el control de seguridad de la planta. Son muy graves y preocupantes ya que allanan el camino para cometer impunemente posteriores actos de sabotaje. Hay que recordar que hechos de coacción y vandalismo como estos fueron denunciados ya por la empresa el pasado 18 de diciembre ante la Comisaria Nacional de Policía de A Coruña».
El fondo de riesgo sostiene, además, que la investigación que llevó al despido se realizó según los procedimientos pertinentes. Sobre este comunicado, Corbacho solo opina «que non é decente nin propio dunha empresa seria como din ser ante unha folga legal. Aquí non se presentou ninguén a traballar. Tampouco nos explicamos que se escriba con esa rabia».
Audiencia Nacional
El parón se produce cuando la Audiencia Nacional ha admitido una querella por el proceso de venta de las plantas de Alcoa en Avilés y A Coruña. «Todo fai pensar que estaba precociñado e que hai un suposto delito de falsidade na venda ao non querer Alcoa que se fabrique aquí aluminio primario», remarca Corbacho.