Alvedro recupera el vuelo de las 9.25 horas a Madrid con fuerte ocupación

El aeropuerto de Alvedro trata de recuperar la normalidad paso a paso y ayer dio uno más con el regreso del vuelo de Iberia a Madrid de las 9.25 horas, que se une al de las 6.30 que volvió a operar hace un par de semanas. La frecuencia rescatada presenta elevados niveles de ocupación para los próximos días, lo que se puede interpretar como la necesidad que existía de su vuelta, ampliamente solicitada desde diversos ámbitos.

El vuelo de las 9.25 horas entre los aeropuertos de Alvedro y Barajas opera de lunes a jueves y para esta semana la ocupación solo está ligeramente por debajo de la mitad para el avión de mañana (aún con margen), mientras que hoy están cubiertos cerca de dos tercios de su capacidad, que es de 144 pasajeros. Este avión llega de la capital 40 minutos antes de volver a despegar desde A Coruña y para estos días también cuenta con al menos la mitad de sus pasajes ya reservados con destino a Madrid.

Paloma Orjales, directora general de Viajes Orzán y miembro del pleno de la Cámara de Comercio, asegura que la recuperación de los vuelos de las 6.30 y de las 9.25 horas son trascendentales para Alvedro. «En cuanto a viajes de negocios, seguramente sí, porque tratas de hacer que las salidas de oficina duren lo menos posible. Si puedes hacerlo sin pernoctar, fenomenal, y por muchas reuniones que hagas a distancia, a veces hay que desplazarse», asegura.

Además, la importancia de estas frecuencias no se percibe únicamente a la hora de desplazarse a la capital, sino también en sentido contrario. «Sirven a gente que viene de Madrid o de otros puntos, el tema es que genere negocios en todos los sentidos porque las empresas tienen que recibir a comerciales, técnicos y otros perfiles», explica Orjales.

En su opinión, estos vuelos tienen un papel destacado a nivel turístico «aunque esto ahora está más parado». También señala que desde la propia compañía le transmiten que ambas frecuencias «están teniendo un comportamiento bastante bueno».

En la misma línea

La recuperación del vuelo de las 9.25 horas se suma a la del de las 6.30, que se produjo el pasado 17 de noviembre, y también lo hizo con buenos índices de ocupación, en algunos casos superando el centenar de viajeros que madrugaron para trasladarse a Madrid, niveles que todavía se mantienen.

La recuperación de estas frecuencias ha sido posible gracias a una experiencia piloto que durará tres meses tras el acuerdo entre el Ayuntamiento, la Cámara de Comercio e Iberia. «La apuesta está hecha y a ver si mantenemos el ritmo», expone Paloma Orjales, quien confía en las «posibilidades» que ofrecen estos vuelos. De hecho, está abierto un proceso de contratación para asegurar la continuidad de la conexión y las frecuencias con Madrid dos años más y con opción a prorrogarlas incluso otro ejercicio. El objetivo es que Alvedro se asegure la permanencia de los vuelos con la capital aunque surjan imprevistos como el de la pandemia.

Punto de conexión

«Madrid siempre ha sido nuestra salida natural hacia otros destinos», reflexiona la directora general de Viajes Orzán, quien explica que estos dos vuelos son los que mejor cumplen la función de abrir el abanico para volar desde A Coruña.

«No solo por el punto final de Madrid, sino las oportunidades que ofrece de conexiones internacionales e intercontinentales», asegura Orjales, quien destaca que estos vuelos reportan beneficios más allá de A Coruña: «Dan servicio a otras localidades como Ferrol o Lugo».

La ruta a Bilbao, en fase de presentación de ofertas para su contratación

Mientras los vuelos a Madrid van regresando paulatinamente, el aeropuerto de Alvedro mantiene otros frentes abiertos en cuanto a recuperación de destinos y frecuencias se refiere.

Uno de estos es la ruta a Bilbao, que operaba Volotea hasta el pasado mes de septiembre y que el Consorcio de Turismo espera que vuelva a estar disponible en el primer trimestre del próximo año. Para ello se inició un proceso de contratación que actualmente está en fase de presentación de ofertas y que tendrá una vigencia de dos años, más la posibilidad de prorrogarlo un tercero, además de un coste de 250.000 euros para la Administración.

Este proceso asegurará dos frecuencias semanales con Bilbao, lo que se traducirá en 26.000 asientos y 208 vuelos anuales. Además, el objetivo secundario es aumentar la conectividad con algunas ciudades francesas como Toulouse, Marsella, Burdeos, Niza y Lyon por medio de la terminal vizcaína.

Londres, a la espera

La situación actual derivada de la pandemia fue el motivo esgrimido por Vueling para eliminar varias de las rutas desde Alvedro, siendo la que conectaba con Heathrow (Londres) la más destacada por sus altos niveles de ocupación y por ser el único destino internacional del aeropuerto coruñés.

Ante esta reducción, la compañía aérea no percibirá la aportación económica que realizaba el Ayuntamiento para la promoción de la ciudad al menos hasta marzo, que es cuando se espera que Vueling comience a recuperar destinos y frecuencias como los vuelos a Londres.

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