Manuel Lógar: «Traer películas que no se estrenaron en España es un lujo para nosotros»

FErnando Molezún A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

EDUARDO PEREZ

El festival de cine de autor celebra su segunda edición a pesar de las restricciones

25 oct 2020 . Actualizado a las 22:05 h.

Comienza una auténtica semana de cine en A Coruña. Todavía nos estamos recuperando de la celebración de la Mostra de Cinema Periférico S8 y se nos echan encima no una, sino dos citas fundamentales: el encuentro de artes audiovisuales Intersección y el festival de cine de autor Cormorán. Ambos arrancan este miércoles y se extenderán hasta el fin de semana, y son una muestra de valentía a la hora de sacar adelante iniciativas culturales con la que está cayendo. El Cormorán Film Fest se celebra en el Teatro Colón, con las limitaciones pertinentes. En un primer momento se contaba con un 50 % del aforo del teatro, que tras las últimas restricciones ha quedado reducido a 60 localidades, lo que supone un 7 % de la capacidad total, al igual que ocurrió con los conciertos de la Programación Lírica. Una medida que se aplica por igual a auditorios de centros cívicos que al más grande teatro de A Coruña y que hay que acatar aunque pueda ser discutida. A pesar de todo, los organizadores han decidido seguir adelante con su celebración: «El cartel lo merece», asegura uno de los directores del festival, Manuel Lógar.

-Está quedando un otoño muy cinematográfico en la ciudad.

-Estas semanas, hasta el festival de foto Ffoco, que viene detrás de nosotros, hay un montón de cosas. ¡Ojalá todos los meses fueran así, llenos de eventos culturales! Coincidimos con Intersección aunque en un principio iba uno después del otro. Pero por el covid hubo que mover fechas y no había otra manera de hacer hueco. Este año las cosas van así.

-Llegan a su segunda edición. ¿Hacía falta otro festival de cine?

-En estos últimos años sí que hemos tenido en la ciudad presencia de un cine más periférico, de videoarte, de manos de festivales como el S8, pero faltaba una cita con el cine más narrativo; de historias, pero de autor. Ese cine humano, de discusión de emociones, de política y sociología. Ver las distintas formas de contar historias interesantes que hay cada año en el mundo. Así que decidimos organizar nosotros esa cita.

-Tienen una programación internacional de primer orden.

-Que un festival tan pequeño como el nuestro pueda optar a programar películas que no han llegado a estrenarse en España es un lujo. Tenemos en esta edición una película que ha ganado en el festival de Róterdam y otra en el de Copenhague.

-Organizar un festival en las circunstancias actuales parece un acto de valentía.

-En un momento dado nos entraron las dudas sobre qué hacer, pero decidimos seguir adelante. No perdíamos nada, al fin y al cabo. Para nosotros, personalmente, es un logro conseguir sacar esto adelante.

-¿Cómo fue organizar el festival en medio de la pandemia?

-Llegó marzo y llevábamos ya dos meses haciendo la programación, contactando con el festival de Berlín, con el de Róterdam y el de Sundance; viendo y seleccionando películas. Y con el coronavirus tuvimos que tomar una decisión, si seguir adelante o pararlo todo. La verdad, es que al ser tan pequeño el festival nos animamos. No es lo mismo el batacazo que te puedes meter si al final tienes que anular un festival de grandes dimensiones y presupuesto alto que si tienes que parar algo como el nuestro, con muy poco dinero detrás. Ten en cuenta que nosotros no ganamos un duro con esto. Eso nos benefició, sin duda. Si alguien podía arriesgarse a hacer algo así éramos nosotros. No teníamos el presupuesto del Curtocircuito ni mucho menos. O de festivales de música que se arriesgaron y que finalmente tuvieron que cancelar.

-La primera edición, el año pasado, se celebró a principios de septiembre. ¿A qué se debe este cambio de fechas?

-Es que nos ofrecieron celebrarlo en el Teatro Colón y eso son palabras mayores, así que supeditamos los días de celebración a la disposición del teatro. Además, el año pasado, en septiembre, seguía haciendo mucho calor, y empezábamos antes, a las 16.30 en vez de a las 17.30. Este horario es mucho mejor. De todos modos, como nuestra intención es ser un festival que combine cine y música, nos gustaría que se celebrase un poco antes, entre finales de septiembre y principios de octubre.

«En A Coruña hay un caldo de cultivo perfecto para los festivales»

En el Teatro Colón se celebraron festivales cinematográficos históricos, como el dedicado a la comedia, de los que coge ahora el testigo el Cormorán.

-¿Hay público para un festival como este en A Coruña?

-De sobra, pero no hay escena. Y eso es lo que queremos conseguir con festivales como este. Ya ha sucedido en otras ciudades como Barcelona. Esta es una ciudad con productoras importantes, con profesionales del sector, con una Escola de Imaxe e Son... Hay un caldo de cultivo perfecto.

-Se presentan como un festival de cine y música.

-El tema musical este año ha tenido que quedar un poco aparcado, aunque en la entrega de premios en la Fundación Luis Seoane queremos contar con alguna actuación, aunque dependemos de las medidas que se impongan por culpa del coronavirus. Tenemos un presupuesto tan limitado que no podemos jugárnosla y tener luego que cancelar la actuación.

-Para el cartel del festival han escogido una imagen de la catástrofe del Mar Egeo.

-Es una foto de César Quian que siempre me ha gustado mucho y que venía muy bien para una edición como esta. No sabíamos cómo reflejar lo que está pasando. Y lo del Mar Egeo es algo que tenemos todos todavía muy presente, una desgracia que superamos, igual que superaremos esta pandemia. Ahora el barco está en llamas, como en la foto, pero encontraremos la salida a todo esto.

-¿Qué podemos esperar para la edición del año que viene?

-El primer año costó hacerlo porque era el debut y nadie nos conocía. El segundo es el de la confirmación, pero nos cogió en el peor escenario posible. Así que esperamos que a la tercera pueda ya convertirse en el gran festival de cine de A Coruña.