El prototipo de la vivienda desplegable está ideado especialmente para situaciones de emergencia
24 sep 2020 . Actualizado a las 18:24 h.Entre 10 y 15 minutos. Ese es el tiempo que se tarda en construir la vivienda desarrollada por un equipo de investigación de la Universidade da Coruña (UDC) especialmente diseñada para ser utilizada en casos de emergencias, como un terremoto o cualquier otra catástrofe natural o de ayuda humanitaria. Juan Pérez Valcárcel, profesor de Estruturas de la Escola Técnica Superior de Arquitectura, explicó que el trabajo, desarrollado durante cuatro años, plantea el uso de estructuras expansibles y plegables, fáciles de transportar y de instalar. «Las casas vienen con suelo, techo y paredes plegadas, empaquetadas y que se pueden amontonar en muy poco espacio. La estructura se despliega por gravedad, se fija en una base y ya estaría lista la vivienda». Indicó que el prototipo no va a ras de suelo, sino sobre unas bases para que, por debajo, puedan llegar las canalizaciones propias que puede tener cualquier vivienda: agua, electricidad, tuberías de aguas residuales...
Un espacio de 18 metros cuadrados
Explicó también que el prototipo estándar tiene unos 18 metros cuadrados y unos 3,5 metros de altura, con lo necesario para instalar los servicios básicos que podría necesitar una familia en situaciones de emergencia o catástrofes, como puede ser un terremoto». Según el experto, el prototipo está diseñado para que tenga la misma duración que cualquier otra vivienda estándar. «Hasta 50 años, si fuera necesario». Aunque lo propio es que las prestaciones duren para vivir en ella un período medio de dos a tres años. «En una situación de emergencia, actualmente y en un primer momento, se recurre a tiendas de campaña para realojar a personas durante estancias aproximadas de seis meses. Pero nuestro prototipo es una vivienda transitoria hasta que la familia pueda encontrar su destino definitivo. Lo bueno que tiene es que, después, es reutilizable». La estructura es de acero plegable, suelo de tablero de madera y un techo con diversos materiales aislantes. Las paredes, también de madera interior, con aislante intermedio y un exterior de acero. El coste aproximado en caso de que alguna empresa esté interesada en desarrollar y comercializar el prototipo rondaría los 500 euros por metro cuadrado. En este sentido, la vicerrectora de Infraestruturas e Sustentabilidade, Amparo Casares, destacó el papel que desarrolla la Universidade da Coruña para potenciar la investigación base.
Premio internacional
Aunque cierto retraso en la llegada de los materiales y algunos contratiempos meteorológicos ralentizaron el despliegue de la estructura, los participantes en el proyecto pretendían demostrar en la mañana de este jueves en el campus de A Zapateira la eficacia de su proyecto. Contando los minutos y supervisando el proceso estaban los investigadores Manuel Muñoz Vidal, Isaac Rodrigo López Cesar, Juan Bautista Pérez Valcárcel y Félix Leandro Suárez Riestra, así como otros miembros del Grupo de Estruturas Arquitectónicas. Su idea obtuvo recientemente el premio Tsuboi de la International Association for Shell and Spatial Structures (IASS), por la publicación del artículo A new approach to expandable structures: crossed expandable frames (X- Frames), elegido cómo el más meritorio del Journal of the IASS del año 2019.Los investigadores, todos profesores de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura, pertenecen a la Agrupación Estratégica del Centro de Innovación Tecnológica en Edificación e Ingeniería Civil (A- CITEEC).