Las plazas de pisos turísticos en A Coruña ya son más de la mitad que las de hoteles

Las viviendas de uso turístico viven un auge desde hace años y A Coruña no es una excepción. Actualmente, los pisos que están registrados para esta finalidad cuentan con un número de plazas que suponen más de la mitad con respecto a las que ofrecen los hoteles, una diferencia que se ha ido reduciendo notablemente en los últimos años.

De acuerdo a los últimos datos de la Consellería de Cultura e Turismo, que lleva estos registros, en la ciudad hay 416 viviendas inscritas para uso turístico. Estos pisos ofrecen más de 1.900 plazas, lo que supone más de la mitad de las que ponen a disposición los hoteles, que son 3.750 distribuidas entre 30 centros. La oferta hotelera se completa con la que ofrecen otros establecimientos como las pensiones, que suman 975 plazas en 44 negocios, o las 285 que están disponibles a través de apartamentos, con lo que contabilizan algo más de 5.000. El aumento del peso de las viviendas turísticas se ve reflejado en los datos de los negocios que tiene registrados la consellería. Frente a las 416 actuales, hace un año había 296 y en julio del 2018 eran 187. El verano pasado eran 1.300 las plazas que ofrecían estos apartamentos.

Los pisos destinados a uso turístico cuentan con una peculiaridad frente a hoteles y pensiones, y es que algunos de ellos compatibilizan el uso comercial con el de residencia durante los meses en los que no están en oferta para alojar a visitantes. Además hay otras viviendas que se destinan a lo largo de todo el año a uso turístico. El incremento de este tipo de alojamiento contrasta con la reducción de los pisos que se destinan a alquiler todo el año.

Verano atípico

Las viviendas para este uso están pasando una temporada especial por las consecuencias de la pandemia. «Es un verano muy atípico por la incertidumbre y ciudades dinámicas como A Coruña, que cuentan con playas, paseos y museos, siguen siendo atractivas, pero no tanto con respecto a otros lugares», explica Dulcinea Aguín, presidenta de la Asociación de Viviendas Turísticas de Galicia (Aviturga).

Así, para estos meses han percibido un incremento en la demanda de «casas con piscina o terrenos amplios» después de una primavera marcada por el confinamiento. Y eso que en la ciudad la oferta es variada, explica Aguín, quien detalla que hay viviendas «en primera línea de playa y también más al interior».

Lo que han constatado es un «pequeño trasvase de gente que antes usaba otro tipo de alojamientos como hoteles o cámpings». El motivo no es otro que la «independencia y las comodidades que dan este tipo de pisos frente a otros», detalla la presidenta de Aviturga, quien destaca que todavía no han recibido de la Administración un protocolo para la correcta desinfección de los negocios.

En relación al aumento de viviendas turísticas en la ciudad cree que influyen diversos aspectos. Uno es la «mayor demanda» que existe desde hace algunos años y otro es que, con el parón provocado por el virus, se pudieron «actualizar algunos datos anteriores», además de que descendió el número de pisos en situación alegal.

Mientras, Housing Coruña es una empresa con varias viviendas turísticas que apuesta por un modelo determinado de pisos. «Tenemos que ofrecer lo mejor e intentamos posicionarnos como una compañía que se dedica a esto, más profesional, con vivienda cuidada y con detalles», explica Isabel Arias. Además, en los últimos años están observando que la ciudad «estaba generando bastante demanda de fin de semana y de puente, no solo de verano», y también orientándose a viajeros de negocios.

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