Javier Aguado: «Ya tenemos muchas reservas de madrileños para julio y agosto»

A CORUÑA

Javier Aguado
Javier Aguado MARCOS MÍGUEZ

El gerente de Merahome resalta que «nunca hubo una demanda tan grande de casas con jardín y piscina»

26 may 2020 . Actualizado a las 21:48 h.

Lleva unos días de locos. No para de enseñar apartamentos, adosados, parcelas y chalés. «Estamos sorprendidos de la demanda que estamos teniendo. Incluso cerramos ventas en pleno confinamiento. Me siento un afortunado dada la situación que vivimos. Jamás hubo una demanda tan grande de casas con jardín y piscina. Como no saben de qué manera se podrá ir a la playa, prefieren tener donde bañarse», asegura Francisco Javier Aguado Álvarez de Sotomayor. «El famoso pintor era tío abuelo de mi madre», aclara el gerente de la agencia inmobiliaria Merahome y de la tienda Mera shop.

«Fundamentalmente tenemos clientes de A Coruña ciudad que vivieron estos meses encerrados en un piso con sus hijos. También percibimos que había gente que llevaba tiempo ya pensando y valorando irse a vivir a una casa y que ahora ha tomado la decisión, a lo mejor por miedo a que haya un rebrote. Hay demanda de parcelas, de casas con jardín tanto para venta como para alquiler. Y otro aspecto diferente al de años precedentes es el de la duración de los contratos. Ahora la gente está alquilando por toda la temporada de verano, no para una semana o quince días», analiza.

Fuente de riqueza

El área de influencia de su agencia son las parroquias oleirenses de Maianca, Serantes y Dexo. «Ya tenemos muchas reservas de madrileños para los meses de julio y agosto. Alguna gente los puede ver con cierta reticencia, pero siempre han sido veraneantes de Mera y creo que han contribuido a la riqueza y mejora de toda la zona», analiza Javier, que fundó la agencia hace ya seis años.

«En el sector empezó mi mujer y socia, Raquel Pernas, que es meracha. Abrió la inmobiliaria Faro de Mera y en el año 2014 inauguramos Merahome. Comenzamos cuando no era el mejor momento, pero nosotros estábamos convencidos de sacar el proyecto adelante» recuerda. Ahora se enfrentan al verano más atípico. «No va a haber sitio para todos. Siempre hubo más demanda que oferta, pero este año más que nunca. En vivienda vacacional está prácticamente todo agotado. Además, como se vuelve a los alquileres de toda la temporada, bloquea la posibilidad de alquilar por semanas o quincenas a otra gente», destaca.

Hombre de mar

El 28 de febrero cumplió 49 años. Los cinco primeros de su vida los pasó en Madrid. Es el mayor de diez hermanos. «Nací en la calle Núñez de Balboa, estos días tan de actualidad. Pero me considero gallego. Mi padre conoció a mi madre en Mera», destaca este exalumno del Santa María del Mar y del colegio público de Canide que empezó la carrera de Derecho y se casó con 22 años. Sus primeros pasos laborales fueron en una sociedad que montó con unos primos dedicada a informes comerciales e investigaciones mercantiles. «Era un trabajo divertido, casi detectivesco», recuerda. Dice que de la tienda Mera shop, dedicada a merchandising de la localidad, entre otras muchas cosas, se encarga más su mujer. La pareja tiene tres hijos: José Luis (Coté), economista de 25 años; Francisco Javier, de 24 y oficial de máquinas que ahora mismo realiza las prácticas en un gasero en Singapur, y Santiago, de 17, que estudia FP de Cocina en el Paseo das Pontes. «Tengo la espina clavada de no haber tenido una niña», reconoce.

Su vida es el mar «Soy armador de una dorna gallega, practico surf, windsurf, paddle surf… Y me encanta el senderismo. Todos los años hago el Camino de Santiago». Dice que es muy temperamental, pero que se controla. Y señala como su principal virtud la honradez. «Nunca engaño a nadie, lo heredé de mi padre», afirma. «Debería haber más alojamientos en la zona como casas de turismo rural y echo de menos más barcos de pesca y una instalación náutica donde puedan parar barcos medianos y grandes. No un club náutico, porque si a Mera la llenas de otras cosas deja de tener su esencia», asegura.