El campamento romano de Ciadella renace bajo la vegetación

F. B. LA VOZ

A CORUÑA

CEDIDA

Los trabajos que se están realizando tendrán que prolongarse más de lo previsto debido al parón provocado por la crisis sanitaria

22 may 2020 . Actualizado a las 21:27 h.

Después de dos meses de intervención arqueológica, el campamento romano de Ciadella, en el municipio de Sobrado, comienza a renacer bajo la vegetación. El pasado 2 de marzo, un equipo de arqueología y conservación-restauración de la Universidade de Vigo está desarrollando un proyecto, impulsado por la Xunta, que pretende ahondar en el conocimiento de este asentamiento militar construido en el siglo II. «Logo de dous meses de traballo, cun parón de tres semanas pola pandemia da covid-19, xa se aprecian os importantes avances da fase de escavación», explica Adolfo Fernández, director del proyecto y miembro del Grupo de Estudos de Arqueoloxía, Antigüidade e Territorio de la UVigo.

El proyecto, en el que el gobierno autonómico invierte cerca de 240.000 euros, es fruto de la consecución por parte del equipo de la Universidade de Vigo del concurso de licitación del trabajo promovido por la Consellaría de Cultura e Turismo y cofinanciado por el Fondo Europeo de Desenvolvemento Rexional. La iniciativa abarca investigación, nuevas excavaciones y tareas de conservación y restauración con una duración total de diez meses

Por lo que respecta a las excavaciones que se están llevando a cabo en la actualidad, tenían una duración de tres meses aunque, debido al parón, será necesario que se prolonguen hasta mediados de junio.

Dos frentes de trabajo

Las excavaciones, explica Adolfo Fernández, se concentran en el edificio 1-2, mientras que en el llamado edificio 4 del yacimiento la intervención consiste en una limpieza y en una reexcavación de los niveles ya intervenidos en los años 90 para proseguir «cunha importante restauración dos restos arqueolóxicos». En la zona del edificio 1-2, detalla el arqueólogo, «xa se escavou por completo a fronte norte, descubrindo os muros norte e oeste dunha grande estrutura do campamento».

Entre este edificio y la muralla, añade, se descubrió un camino perimetral, la llamada «via sagularis». También se avanza en este sector en la excavación de una gran área que completaría la totalidad del edificio, llegando hasta la calle principal del campamento, llamada «via principalis». Además de las estructuras campamentales del alto imperio, el equipo de la UVigo está detectando «unhas importantes fases de reocupación civil do xacemento datadas a finais do século IV e outra posterior, xa do século VI en diante, que inclúe unha zona de necrópole posiblemente das épocas tardoantiga e altomedieval que non era coñecida en toda a súa extensión. Algunhas delas conservaban parte do cadaleito de madera polo que a súa escavación está sendo moi complexa», señala Adolfo Fernández. Por ello, el objetivo de esta campaña es conseguir conocer la planta de la primera fase, la del campamento militar, y así reconocer la funcionalidad de los edificios que ocupan la parte central del recinto castrense.

Por lo que respecta a la zona del edificio 4, Adolfo Fernández comenta que «avanzouse na retirada de boa parte da cobertura vexetal que o tapaba, deixando á vista elementos que foran escabados nos anos 90». Se excavó, detalla, el frente sur «e nuns días toda esta área estará lista para o seu rexistro pormenorizado mediante fotogrametría 3D e, posteriormente, procederase a escavacións puntuais co obxectivo de clarificar as estruturas campamentais aquí agochadas baixo unha importante ocupación tardoantiga e medieval, protagonizada por unha igrexa e outras edificacións anexas».

Importancia del yacimiento

Adolfo Fernández recuerda que «é moi complexo, xa que presenta unha ocupación prolongada desde a construción inicial do campamento militar, probablemente xa a finais do século I, coa posterior chegada e instalación da Cohors I Celtiberorum, ata os séculos XII-XIII, cunha importante ocupación tardoantiga que se estende por riba do forte militar romano asociado a unha primitiva igrexa alto medieval, que no século XII foi trasladada a poucos metros fóra do xacemento».

Esta unidad militar mixta dependía directamente de la Lexio VII Gémina, establecida en León, siendo su principal función la de garantizar la comunicaciones entre Lucus Augusti (Lugo), una de las capitales romanas del noroeste, y el puerto de Brigantium (A Coruña), además de controlar las explotaciones mineras de la zona y dar soporte a la Administración para el cobro de los impuestos.