El Chuac realiza seis trasplantes en solo 24 horas en plena pandemia

Francisco Brea
F. Brea LA VOZ

A CORUÑA

Chuac. Pandemia del coronavirus
Chuac. Pandemia del coronavirus ANGEL MANSO

A pesar de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus, 250 profesionales trabajaron durante todo el día para que media docena de pacientes se vieran beneficiados. En lo que va de año, se realizaron en el complejo coruñés 30 trasplantes renales, 18 hepáticos, 13 pulmonares y siete cardíacos

13 may 2020 . Actualizado a las 14:27 h.

El equipo de trasplantes del Chuac realizó en 24 horas seis injertos de órganos sólidos, uno de ellos doble. Más de 250 profesionales estuvieron trabajando todo el día para que este trabajo fuera exitoso. Los órganos injertados procedían de donantes fallecidos en el Hospital La Fe de Valencia, en el Complexo Hospitalario Universitario Álvaro Cunqueiro de Vigo, en el Hospital Lucus Augusti y en el propio Chuac.

Los trasplantes realizados correspondieron con tres injertos renales, dos hepáticos y uno bipulmonar. Gracias a la solidaridad de las familias de los donantes e al trabajo del equipo de trasplantes del Chuac, seis pacientes se vieron beneficiados.

Esta labor no sería posible sin la implicación de los equipos multidisciplinares que forman urólogos, cirujanos generales y torácicos, así como nefrólogos, hepatólogos, neumólogos y anestesistas, además del personal que trabaja en las unidades de reanimación y cuidados intensivos, sin olvidar al personal de enfermería y servicios generales del Chuac.

A pesar de la crisis sanitaria, la actividad trasplantadora del complejo hospitalario coruñés sigue funcionando a buen ritmo. En lo que va de año, se llevan realizados 30 trasplantes renales, 18 hepáticos, 13 pulmonares y siete cardíacos. El número de donantes captados fueron 13.

«Necesitábamos una noticia optimista que no tuviese que ver con el coronavirus», exclamaba este miércoles Fernando Mosteiro, coordinador de trasplantes del Chuac y médico en la uci del centro coruñés, que subraya la «excepcionalidad» de  en plena pandemia llevar a cabo en tan corto espacio de tiempo tantos recambios vitales, algo que desde el advenimiento del coronavirus no ha pasado en ningún centro de España. «No es habitual ni siquiera en una situación de normalidad, habitualmente no suelen coincidir tantos donantes a la vez», señala antes de subrayar, sobre todo, el agradecimiento a la solidaridad de las familias para donar: “Hemos tenido la fortuna de tener tres donantes en la comunidad y otro en Valencia que han generado siete órganos para seis receptores», resume.

La realización de esta actividad exigió la movilización de más de 200 profesionales para el correcto funcionamiento de un engranaje ya muy engrasado en el centro coruñés, pero al que, debido al covid-19, se añaden más exigencias. «Los protocolos de trasplantes ya son muy estrictos, a mayores ahora hay que hacer el chequeo del covid, hay que realizar el test PCR tanto a cada donante como a cada receptor», explica.

Además, a la hora de practicar las intervenciones, como sucede en otro tipo de intervenciones, el hospital ya cuenta con circuitos separados. «Se hacen en una zona aislada, para los trasplantes y para el que viene a operarse de cualquier otra cosa», apunta. 

El operativo se puso en marcha el lunes por la tarde, cuando recibieron el aviso de que había un donante en el propio Chuac y simultáneamente apareció otro en el Álvaro Cunqueiro. Al rato «nos llamaron de Valencia, de donde vinieron los pulmones, y unas horas después surgió otro más en Lugo», indica Mosteiro. Un equipo se trasladó a Vigo a realizar la extracción de órganos mientras otro hacía lo mismo en los quirófanos de A Coruña y desde La Fe enviaban los suyos. Horas después, los cirujanos locales se desplazaron al hospital lucense. «Ahora mismo se prioriza el envío, sobre todo de fuera de la comunidad, hay menos vuelos y también como medida de protección para reducir la movilización de personal de unos centros a otros», indica el coordinador 

Cada intervención duró entre tres y cinco horas y todas se desarrollaron sin complicaciones. La última se practicó el martes por la tarde. «Ninguno fue un trasplante en emergencia cero, eran todos pacientes en lista de espera que llamamos a casa para darles la noticia, y todos evolucionan satisfactoriamente», comenta con tranquilidad tras toda «una carrera, pasas de tener muy poquita actividad a que, de repente, te llaman y hay un donante aquí, otro allí, otro más allá… tanto trasplante en tan poquito tiempo es gracias a la generosidad de cuatro familias, por favor, eso hay que destacarlo: nosotros solo hacemos nuestro trabajo y estamos deseando poder transmitir a la población que volvemos a recuperar la actividad de hace un par de meses, siempre y cuando no demos un paso atrás».