Los profundos retratos de Xosé Casal, en Cántigas da Terra

Vítor Mejuto
Vítor Mejuto A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

VÍTOR MEJUTO

Compositor y gaiteiro excepcional, Casal es, sobre todo y desde muy niño, pintor

12 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

A veces la Cultura no ocurre en los grandes salones, sobre todo cuando se trata, como en el tema de la pintura, de una cuestión de resistencia. Estos días Xosé Casal expone su pintura en el local de ensayo de Cántigas da Terra, en Ramón del Cueto. Allí estará a la vista del público hasta el 28 de febrero.

Mientras los músicos ensayan, la pintura se abre paso y a veces se solapa con la música, como en la propia biografía del autor. Xosé Casal (Curtis, 1942) es un personaje fundamental en el ámbito de nuestra música. Compositor, gaiteiro excepcional y miembro del mítico cuarteto Brisas da Cruña, además de director de la histórica agrupación Gaiteiriños. Pero sobre todo y desde muy niño, Xosé Casal es pintor.

Alumno del gran maestro Luis Quintas Goyanes —del cual, por cierto, hay un retrato en esta muestra—, Xosé Casal siempre destacó por su destreza en el dibujo. Y este, como es obvio, se traslada a la pintura.

En su autorretrato se aprecia, además, un gran dominio del color, con una factura vibrante apoyada en una gama fría y una pincelada de gran naturalismo.

El retrato de Mauricio Farto (fundador de Cántigas da Terra, obra que el autor dona a esta institución) es otro ejemplo de ello, con un rico tratamiento del fondo logrado con pinceladas cortas y con un ligero empastado que dota al conjunto de una gran profundidad.

Por su parte, en el retrato de Rosalía Dans, para el cual posó la propia actriz, se aprecia como el autor es capaz no solo de lograr todo lo que se espera de un buen retrato, sino de adentrarse en la propia persona. En definitiva, pintar su interior.