Nostián, entre el secuestro y el rescate

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA

CESAR QUIAN

La explotación de la planta de reciclaje cuesta 12 millones al año, sin añadir una maquinaria vieja y los rechazos

11 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

En el segundo día de huelga en Nostián, la planta de reciclaje de residuos de A Coruña, los trabajadores dieron un paso más en sus medidas de presión. Con la vista puesta en que no se aplique el ERTE anunciado por la empresa gestora, Albada, que costará el puesto a 39 empleados fijos y 20 eventuales, los operarios mantuvieron sus medias de presión, que ayer, según fuentes municipales, lastraron el funcionamiento de toda la planta, al ralentizarse la entrada y salida de camiones de las instalaciones. Aunque no se llegó a ver la basura en las calles que temía el Ayuntamiento.

La resolución total de la crisis no llegará posiblemente hasta el 1 de enero, cuando el Ayuntamiento prevé intervenir en la planta, sea a través del rescate o secuestro de la concesión, o del trámite de un contrato de emergencia. La decisión final depende de los servicios jurídicos municipales, que desde hace días trabajan la resolución al conflicto.

La opción más probable

El secuestro. Durante los últimos días, el gobierno local ha subrayado que intervendrá la planta si el 1 de enero se ejecutan los despidos y se incumple el contrato de la concesión. Pero no ha dejado claro cómo lo hará. Sobre la mesa hay distintas opciones, aunque quizá la más ventajosa, según fuentes conocedoras del conflicto, sea el secuestro, que consiste en el nombramiento de un supervisor que dirija el servicio por encima de la empresa gestora, por lo que podría anular la regulación de empleo. Las mismas fuentes comparan esa figura, salvando las distancias, con la de un administrador concursal.

Los posibles costes

Más de 12 millones al año. Los costes de explotación de la planta rondan los 12 millones de euros al año, un tercio de los cuales corresponden a los salarios y gastos en personal. Esa cantidad está calculada para la entrada de entre 450 y 500 toneladas de basura mensuales, y podría variar si los ayuntamientos de la comarca dejasen de ir a Nostián, lo que el Ayuntamiento pretende evitar.

Esos 12 millones serían el coste habitual, pero hay que sumar extras por dos factores. El primero es que la maquinaria de la planta está amortizada y en su mayor parte al límite de su vida útil, por lo que se prevén gastos en reparaciones. Además está el gasto en la gestión de los rechazos, que en toda Galicia se ha disparado en los dos últimos años, y ahora está asumiendo la gestora.

El futuro contrato

Rescate temporal. El rescate supondría que el Ayuntamiento se hiciese en su totalidad cargo de la planta, incluyendo los costes e ingresos; mientras que el secuestro pondría la planta bajo dirección municipal, aunque se mantendrían las condiciones contractuales vigentes y después se resolverían las diferencias económicas. En ambos casos, todo indica que la gestión municipal directa sería solo una opción temporal. Los pliegos de la futura concesión que el departamento de Medio Ambiente ya ha entregado a Contratación prevén que el importe del nuevo contrato ascienda a 272 millones de euros durante 15 años. Ese importe tiene en cuenta las importantes inversiones que habrá que realizar en la planta durante los próximos años, con el fin de alcanzar un porcentaje de rechazos -basura que no puede ser reutilizada- inferior al 29 % y renovar las instalaciones, que con la excepción de la planta en la que se obtiene combustible derivado de residuos (CDR), están obsoletas. Es casi impensable que el Ayuntamiento asuma esa cantidad, por lo que, como ya se está haciendo, todo indica que se sacará de nuevo la gestión a concurso.