Albada plantea una regulación temporal de empleo en Nostián y la plantilla prepara protestas

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA

EDUARDO PEREZ

La Marea preveía desde febrero que la planta se quedaría en precario por no licitar el nuevo contrato

01 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La empresa gestora de la planta de Nostián ha puesto sobre la mesa la posibilidad de aplicar un expediente de regulación temporal de empleo a partir del 1 de enero, cuando las instalaciones se quedarán sin contrato. Por su parte, la plantilla se reunió ayer en una asamblea en la que el comité de empresa solicitó autorización para adoptar medidas de presión de forma inmediata si sus puestos se ven amenazados. Por su parte, el gobierno local ha establecido contactos con ambas partes, y ha condicionado cualquier negociación con la compañía a que se paralice el expediente. Además, Medio Ambiente acelerará la redacción de los pliegos del futuro contrato con el fin de proteger el empleo.

Hace una semana, la empresa informó al Consorcio das Mariñas de que no gestionará la basura de sus ayuntamientos (Abegondo, Bergondo. Betanzos, Cambre, Carral, Culleredo, Oleiros y Sada). El expediente de regulación de empleo se justificaría a partir de esa bajada de la producción, y afectaría a casi el 40 % de la plantilla de la instalación, alrededor de 37 trabajadores.

Contactos Marea-empresa

La renovación del contrato de Nostián, como los de recogida de basura y limpieza viaria, debían haberse tramitado durante el mandato pasado, pero las gestiones no se pusieron en marcha.

Durante las últimas semanas, la Marea Atlántica ha responsabilizado al gobierno local del PSOE del retraso en los pliegos. Sin embargo, el anterior ejecutivo local de la Marea y la empresa gestora Albada eran desde principios de año conscientes de que esos documentos no estarían listos a tiempo. Así se deduce de los escritos que intercambiaron la dirección de la compañía y la anterior concejala de Medio Ambiente, María García, entre los meses de febrero y mayo de este año.

El primer de ellos fue remitido por la gerencia de Albada al Ayuntamiento el pasado 7 de febrero. En el documento, la firma recuerda que el contrato finalizará el próximo 1 de enero del 2020, y muestra su deseo de denunciar la terminación del mismo, con el fin de que el Ayuntamiento lo adjudique de nuevo o asuma la gestión directa de la planta.

La remunicipalización de servicios públicos era una promesa electoral de la Marea, pero en este caso no se contempló. En su respuesta a Albada del 13 de febrero, García informa a la compañía de que «este Concello está realizando os trámites necesarios para licitar canto antes un novo contrato», pero subraya que «a partir do 01.01.2020, teñen a obriga de continuar na prestación do servizo». Lo que indica que el anterior gobierno local, pese a las declaraciones de la Marea Atlántica de las últimas semanas responsabilizando al actual ejecutivo, daba por hecho que el contrato no estaría listo a tiempo.

Así lo consideraba también la empresa en su contrarrespuesta, enviada a Medio Ambiente el 23 de mayo. En el escrito, Albada denuncia que el hecho de que el contrato vigente recoja unas previsiones para la posible prórroga del contrato «no autoriza a esa Administración, ni mucho menos, justifica, la inobservancia de la diligencia necesaria para proceder a la nueva licitación; diligencia manifiestamente omitida, dado que (...) aún no consta la realización de actuación administrativa» relativa al fin del contrato. Como consecuencia, la empresa advertía que esa «inactividad administrativa» producirá «perjuicios económicos» a la compañía que «no tiene obligación de soportar».