Las cuentas del Ayuntamiento de A Coruña rompieron el techo de gasto en el 2018 y estarán vigiladas

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

EDUARDO PEREZ

La Xunta advirtió del problema en abril, pero el gobierno anterior no lo hizo público. Los informes sitúan el desajuste en 2,34 millones de euros

16 jul 2019 . Actualizado a las 09:51 h.

El Ayuntamiento de A Coruña incumplió el regla de gasto en el 2018 y tendrá que presentar un plan de ajuste hasta el 2020.

El desajuste de las cuentas locales asciende a 2,34 millones de euros, según los informes del interventor y de la Dirección Xeral de Política Financeira, Tesouro e Fondos Europeos de la Xunta, que es responsable de la tutela de las cuentas municipales.

De esos 2,34 millones totales, 1,18 corresponden al Ayuntamiento, 615.000 euros al Instituto Municipal Coruña Espectáculos (IMCE), casi 50.000 euros al Consorcio da Música, 231.000 al Consorcio de Turismo, 157.000 euros a la Fundación Emalcsa, 18.600 euros a la Fundación Luis Seoane, y 125.000 al Fondo Galego de Cooperación e Solidaridade.

El plan financiero, que el gobierno local llevará a pleno en próximas semanas, no incluye medidas de intervención directa en la Hacienda del Ayuntamiento, sino que es de carácter formal, ya que se supone que la correcta ejecución y liquidación de las cuentas durante este ejercicio y el 2020 supondrá que se vuelva a cumplir la normativa vigente de estabilidad presupuestaria.

Por lo tanto, el plan consistirá en el seguimiento y control de la actividad económica de María Pita, con el fin de que la ruptura del techo de gasto no se repita durante próximos ejercicios.

El motivo de la infracción que ha obligado a poner en marcha el citado plan de ajuste es que el gobierno local anterior utilizó remanente líquido -fondos que no logró gastar- del año 2017 para financiar nuevos gastos que no estaban incluidos en el presupuesto definitivo del 2018.

Se trata, por lo tanto, de un problema coyuntural, que no afecta a la estructura económica del Ayuntamiento, de ahí que el plan de ajuste no lleve aparejadas medidas que impliquen una intervención mayor en los próximos presupuestos municipales.

Sin embargo, sí será necesaria una vigilancia más exhaustiva de las cuentas municipales, y también de los entes que dependen directamente del Ayuntamiento. 

Un asunto que no se aireó

El toque de atención del organismo que tutela las cuentas municipales y la necesidad del plan de ajuste no ha sido una sorpresa para gran parte del personal municipal. En realidad, el toque de atención de los organismos que tutelan la gestión económica del Ayuntamiento se conoce desde hace meses. El pasado 12 de abril, el interventor del Ayuntamiento emitió un informe sobre la estabilidad presupuestaria del Ayuntamiento, que fue remitido a la citada dirección general de Política Financeira, Tesouro e Fondos Europeos de la Xunta.

Ese organismo envió al Ayuntamiento una solicitud para la puesta en marcha de un plan económico financiero el 25 de abril, un mes antes de las municipales.

El anterior ejecutivo local de la Marea nunca hizo pública la llegada de ese escrito, ni tampoco se refirió a la ruptura del techo de gasto en el 2018. Es más, la documentación de la liquidación de ese año, que se aprobó el 25 de marzo mediante una resolución del alcalde, Xulio Ferreiro, no fue presentada a los grupos de la oposición y a día de hoy todavía no se ha hecho pública. 

Quince millones se fueron a la banca por no pagar a tiempo a los proveedores

En la gestión económica del gobierno local de la Marea Atlántica se da la paradoja de que, pese al incumplimiento del techo de gasto, no se pudieron destinar a inversiones 15 millones de euros del remanente del ejercicio anterior porque la Administración local incumplió el plazos de pago a los proveedores. Los 15 millones, por imperativo legal, tuvieron que destinarse al pago de la deuda bancaria, pese a que los niveles de endeudamiento del Ayuntamiento de A Coruña no superan los límites marcados por el Ministerio de Hacienda.

El nuevo gobierno local, que se hizo cargo de la gestión de María Pita hizo este lounes un mes con la investidura de Inés Rey como alcaldesa, recibió del ejecutivo anterior un presupuesto prorrogado que estará vigente hasta el mes de diciembre. De esas cuentas de 267 millones de euros, el equipo de Rey disponía al arrancar su mandato de 187,3 millones, cantidad con la que debe hacer frente a los seis meses que quedan por delante.

Para realizar inversiones, el ayuntamiento dispone de casi 32 millones de euros, que si no se gastan en lo que resta de ejercicio volverían a engrosar el remanente. Y si se mantiene el incumplimiento de los plazos para el pago a proveedores, debería volverse a descontar deuda bancaria. El equipo socialista dispone, no obstante, de la posibilidad de negociar con los otros grupos municipales modificativos de crédito para ir haciendo frente a los proyectos que quiera llevar adelante. Uno inmediato sería el plan de choque pata la limpieza de la ciudad que prometió la alcaldesa.