El proyecto de Voz Natura «Somos de monte» incluyó una actividad sobre la reforestación tras los incendios
21 may 2019 . Actualizado a las 10:28 h.Un carballo, un castiñeiro, un freixo y un ameneiro en el parque de Monticaño llevan la marca de los niños de la escuela infantil Barrionovo. Con sus manitas (tienen de 3 a 5 años) 38 de los pequeños alumnos han plantado estos ejemplares autóctonos, dentro de las actividades de concienciación medioambiental que llevan a cabo en el centro.
La directora, Alba Presedo, y los profesores Irene Agra, Lucía Torrecilla, Silvia López, Maite Cordo y Sergio Castiñeiras han sembrado el interés de los niños, que participan en el programa de divulgación Voz Natura. Para ello, a lo largo del curso desarrollan un proyecto que han bautizado como Somos de monte, que en días pasados incluyó la salida al campo.
De la mano de la asociación Galicia Ambiental, que habló a los chiquillos de su programa Árbores de cinza, impulsado a raíz de los incendios que asolaron Galicia, quisieron prender en las aulas el interés por la deforestación que causa el fuego y mostrarles, sobre el terreno, la importancia de tratar de recuperar los terrenos arrasados por las llamas.
Pudieron hacerlo plantando especies propias de Galicia, para lo que contaron con la ayuda de los miembros del Centro Especial de Empleo Social del parque del Monticaño, que les echaron una mano para poder colocar los árboles. «É unha forma de poñer o noso graniño de area contra o lume», resumió una de las docentes