Wim Mertens: «Ponerle etiquetas a la música es limitar su poder»

Fernando Molezún A CORUÑA

A CORUÑA

CÉSAR TOIMIL

El compositor belga recala en el Teatro Colón el 1 de febrero para presentar su nuevo álbum, «That which is not»

15 ene 2019 . Actualizado a las 09:34 h.

En la dilatada carrera del compositor belga Wim Mertens se ha atrevido a deambular por los más apartados rincones del espectro musical. Enmarcado dentro del amplísimo cajón que es la música contemporánea, siempre ha huido de etiquetas, lo que le ha permitido hacer siempre lo que le ha dado la gana. Vuelve a demostrarlo en su último disco, That which is not, que presentará el 1 de febrero en el Teatro Colón. 

-Resulta complicado definir su música sin temor a quedarse corto.

-La música siempre ha tenido esa capacidad de estar ahí, de estar presente para todos sin necesidad de explicar explícitamente su significado. Es un medio que puede generar grandes expectativas de ilusión, tristeza o felicidad en la gente sin necesidad de que acotemos el significado que le queramos dar, que al fin y al cabo sería nuestro propio significado, sin más. Eso es lo que define a mi música, esa capacidad que tiene, de manera que si le ponemos etiquetas puedes limitar su poder.

-Su último álbum vuelve a ser difícil de catalogar.

-El álbum se concentra en la noción del no, de la negación. Es algo que ya había tratado antes y que incluso lo había utilizado en algún título, como en Essence of the (K)not, No plans, no projects, No testament, Not at home, The paths not taken... Así que en este disco he querido escapar de la noción tradicional de este término como algo negativo. Quise mostrar las maneras positivas en las que puedes decidir en la vida, aún diciendo que no. Inyectar un poco de positividad en la cantidad de negatividad que tenemos en Europa hoy en día.

-Así que ha encontrado más inspiración en las noticias que en otras músicas.

-Sin duda. Puede sonar exagerado, pero entiendo que mi meta como compositor no es la música en sí misma, sino que va más allá. Está en su relación con la sociedad, en la traducción a música que sea capaz de hacer del mundo actual. Y esto tiene que ver con el modo de interpretar, con los riesgos que corres en cada directo, bien sea solo o acompañado por otros músicos, donde no puedes calcularlo todo.

-¿Y cómo será su concierto de A Coruña?

-Esta pequeña gira que vamos a emprender por España está pensada para tener distintos modelos de puesta en escena: solo, en formato dúo o trío, con banda... Son distintas maneras de entender mi música. Y esto es posible hacerlo precisamente por el concepto que tengo de mis composiciones, en el que siempre estoy muy cerca de la estructura original de las canciones. Esto permite jugar con ellas. No compongo de una manera hierática, vertical, sino de una manera maleable y más versátil.

-¿Qué formato le gusta más, solo, con banda...?

-Son complementarios. Son diferentes lecturas y variaciones de mi música, y cada una aporta algo distinto. Cuando estoy al frente de una banda mi papel es el de dirigir, muy distinto que cuando estoy solo como intérprete. No sabría con cuál quedarme.

Viernes 1 de febrero • Teatro Colón • 20.30 horas • Entradas de 20 a 26 euros •