Una pintada «estrena» el café de la Farmacia Europea en su apertura

Mila Méndez Otero
M.Méndez A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Los grafitis manchan la cristalera, protegida por Patrimonio, de un nuevo local en la calle Real

13 dic 2018 . Actualizado a las 18:05 h.

Todos le quieren hacer una foto. Muchos se enteraron de su apertura al pasar por delante. No faltaron las exclamaciones de admiración. Real 63 ocupa el local que un día fue la Farmacia Europea, abierta en la calle Real en 1888. Sin embargo, la imagen -ya con hashtag propio en Instagram- tiene una mácula. En la cristalera hay un borrón y lo que parece una firma estampada con tinta negra. «Desde que abrimos, el pasado jueves 6 de diciembre, llevamos cinco grafitis. Es muy grave. El cristal tiene 150 años, está protegido por Patrimonio y las últimas pintadas no salen. Ni la empresa especializada que contratamos es capaz de sacarlas», cuenta uno de los responsables de la nueva cafetería que apenas cuenta con una semana de vida.

En siete días de vida, su escaparate ha sufrido ya cinco pintadas. La última es imposible de borrar y afecta a una cristalera de 150 años protegida por Patrimonio
En siete días de vida, su escaparate ha sufrido ya cinco pintadas. La última es imposible de borrar y afecta a una cristalera de 150 años protegida por Patrimonio MARCOS MIGUEZ

El establecimiento es uno de los más singulares de la vía comercial. Se inauguró por primera vez en 1750. Era un café y salón de tertulias. «Real 63 es un ejemplo de que la calle está remontando», asegura Antonio Amor, presidente de la asociación de comerciantes del Obelisco. El colectivo empieza a respirar tras años de cierres. En los últimos meses han abierto cinco locales, desde un restaurante, A Mundiña, a una tienda de lencería. Pero, no les dan un respiro. Desde la cafetería reconocen que están «indignados». Se sienten «impotentes. Llamamos al Ayuntamiento y la única respuesta que nos dan es que en el departamento competente no están obligados a responder al teléfono. No hay un interlocutor al que reclamar. La Policía Local y la Nacional nos dicen que no tienen medios para evitar estos actos vandálicos», reprochan.

El café está en uno de los locales más icónicos de la ciudad. Cerrado tras la marcha de la Farmacia Europea, abierta en 1888
El café está en uno de los locales más icónicos de la ciudad. Cerrado tras la marcha de la Farmacia Europea, abierta en 1888 MARCOS MIGUEZ

Al lado de la cafetería, la sastrería Fields acaba de cumplir dos meses. «Pude ir a la plaza de Lugo pero elegí la calle Real. Para mí es la mejor. Podría ser la gallina de los huevos de oro pero no le dejan. Cada mes asumimos miles de euros en gastos fijos. Y, además, mimamos el espacio y su entorno. Yo mismo acondicioné el cableado que está junto a la sastrería. Desde el Concello deberían apoyarnos más, generamos riqueza», subraya David García Bragado, el responsable de Fields.

Los más veteranos están curados de espanto, pero no menos molestos. «Nos destrozaron una fachada de piedra de cantería. Limpiarla fueron 250 euros, pero seguimos expuestos», dice Tonecho López Villanueva, de Calzados Vogue. «Tenemos una pintada en un lateral. Otra anterior la limpiamos. ¿Qué pasó? Volvieron a pintar», reprocha Antonio Aba, de Perfumerías Garrote.

Plataforma vecinal

Tras las continuas quejas, el gobierno local de la Marea ha anunciado la puesta en marcha de un plan integral para borrar unas pintadas que primero tildó de «asunto mundano» y ahora, admite, son «vandalismo». Non Máis Pintadas es el nombre de la plataforma vecinal que ha tomado la delantera. Cansados de los borrones, los vecinos ya limpian con sus propios medios estas manchas en seis barrios.

El «top manta» y la subida de los alquileres aprietan a los comerciantes

Los comerciantes admiten que los grafitis son un reflejo del «abandono» que se extiende por esta vía. «Los que más dinero ingresan aquí son los que no pagan impuestos», suelta con malestar Antonio Aba Garrote. «¡A Bonilla no le permiten colocar dos mesas en la calle porque invaden la vía pública! ¿Y los manteros?», pregunta Tonecho López.

Entre sus reivindicaciones está la de una ordenanza municipal más dura que sancione estos actos que definen como vandálicos
Entre sus reivindicaciones está la de una ordenanza municipal más dura que sancione estos actos que definen como vandálicos MARCOS MIGUEZ

Los alquileres son otra de las trabas. «Si hay locales cerrados no es porque les falten novias. Un alquiler no baja de los 3.000 o 4.000 euros aquí. Cuando hay aperturas los propietarios se sienten legitimados para subir las rentas», apunta Antonio Amor. «Eliges. O 6.000 euros aquí o 2.000 en un barrio periférico», opina Tonecho López, que le resta importancia a este hándicap. García Bragado, de Fields, es optimista con el futuro que está por venir: «Es difícil luchar contra la historia de la calle Real. La calle comercial por excelencia de la ciudad».