Los tres siniestros, uno de ellos mortal, se produjeron en un margen de apenas una hora durante la tarde del domingo
19 jun 2018 . Actualizado a las 12:36 h.Tres accidentes graves con motoristas en apenas 50 minutos. Y los tres de forma aislada, sin la intervención de otro vehículo. Hoy será incinerada la única víctima mortal, la del accidente ocurrido en O Quinto Pino, donde un joven de 36 años y vecino de A Coruña se estrelló contra el quitamiedos de la carretera que une la ciudad con Arteixo, concretamente en el punto kilométrico 4,9.
Precisamente este fin de semana se celebraba en Arteixo una concentración motera del club local. Algunos miembros de los cuerpos de emergencias de la comarca ya apostillaban que «es una cuestión de estadística, a más motos más probabilidades de accidentes».
Pero una cosa es la confluencia y otra el desplazamiento. «Generalmente cuando vamos en ruta, en grupo, los accidentes son casi inexistentes», explica José Ángel Montes, presidente del Motoclub Betanzos, localidad que también ha celebrado otro encuentro motero recientemente. «Son hechos que hay que lamentar, nosotros siempre recalcamos que se extremen el cuidado y la velocidad», añade.
En Ledoño
También muy cerca de Arteixo se produjo otro siniestro con una moto como protagonista. Fue en la parroquia de Ledoño (Culleredo) y la aparatosidad del siniestro motivó la presencia del helicóptero medicalizado, con base en Santiago, que llegó incluso a aterrizar en el lugar. «Pero finalmente pareció menos grave de lo que se pensaba y fue evacuado al Chuac en una ambulancia», indicaron desde la Policía Local de Culleredo. Pero aún quedaba un accidente más, esta vez en Betanzos y totalmente ajeno a la concentración de Arteixo. También de forma aislada, sin intermediar terceros vehículos, un vecino de Bergondo de 47 años se estrelló contra un edificio en la calle Saavedra Meneses, en sentido entrada a Betanzos, cuando acababa prácticamente de arrancar su máquina. El hombre perdió el equilibrio y se empotró contra la curva ubicada enfrente de la subida a Os Remedios. También en un primer momento se temió por su vida, fruto de la gran brecha que se abrió en la cabeza y por la que perdió abundante sangre. Pero en las horas siguientes su pronóstico mejoró.
La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil recalcó ayer a través de un comunicado «la importancia de evitar distracciones en la conducción, así como la fatiga por parte de los conductores».