La cubierta del Parque da Lagoa genera división de opiniones en Mera

Elena Silveira
Elena Silveira OLEIROS / LA VOZ

A CORUÑA

CESAR QUIAN

Unos creen que no resguardará de la lluvia y otros que facilitará el ocio en invierno

20 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Es una de las actuaciones estrella del gobierno local en Mera: la cubierta del Parque da Lagoa. Pero ahora que está inaugurada, los vecinos han aplaudido y criticado en partes iguales la nueva infraestructura. Buena parte de ellos dicen que permitirá desarrollar actividades los días de invierno sin que la gente se moje por la lluvia y, en verano, huir del sol que, en la explanada, cae a plomo. Los detractores creen que, al ser tan abierta, no cobijará a los posibles usuarios de la lluvia y dudan de la buena acústica que tendrá en conciertos y verbenas. «La plaza estaba bien como estaba antes. Esto afea el entorno natural tan bonito que tenemos», explicaba ayer un afectado. Al margen de esta polémica, muchos vecinos y paseantes se acercaron hasta la zona para comprobar cómo quedó la cubierta así como el nuevo parque infantil tras su reforma.

Más satisfacción generó la apertura del nuevo local municipal destinado a albergar las actividades de la asociación de vecinos de Maianca así como las del Centro Deportivo Mariñeiro. María Siso, presidenta de la entidad vecinal, confirmó que la sede ya está preparada y disponible para utilizar pero que, por el momento, no realizarán el traslado y finalizarán las actividades de este curso (cestería y teatro) en la Casa do Pobo de Mera. «Contamos con poñernos en funcionamento en breve, cos talleres que organizaremos para o verán, pero de cara ao próximo curso teremos que artellar unha reunión cos veciños para coñecer as súas demandas e intereses. Tamén teremos que sentarnos para distribuír os horarios das actividades, porque xa hai xente maior que nos está pedindo o espazo para as súas reunións», confirmó María Siso. «Haberá un horario adaptado ás demandas feitas e ás actividades que se vaian levar a cabo, porque somos unha entidade pequena, non temos conserxe e o local non poderá estar aberto todo o día», aclaró. La presidenta de la asociación comentó que muchos vecinos les dieron la enhorabuena por este nuevo local después de una década saltando de una sede a otra. En este sentido, recordó que pasaron por la Casa do Mar, el local social situado anexo antes de que se llevara a cabo su reforma, el de la agrupación de pensionistas, un bajo en la plaza Ana Kiro y, en los últimos años, la Casa do Pobo de Mera, «onde por falta de espazo e horario tan so puidemos desenvolver dúas actividades». María espera que con el traslado a la nueva sede haya un repunte en el número de socios (actualmente son 200) así como en las personas inscritas a actividades, «porque poderemos ofertar máis», puntualizó.