El vandalismo sigue destrozando bienes públicos y privados

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

M. R.

El incendio de dos contenedores calcinó ayer un coche aparcado, mientras las pintadas afectan hasta a los edificios oficiales

01 oct 2018 . Actualizado a las 12:39 h.

Dos contenedores ardieron a las seis de la mañana del domingo en la calle Fernández Latorre. Estaban situados en un lateral del edificio del sindicato UGT. Cuando los bomberos llegaron al lugar no pudieron evitar que el fuego dañara, gravemente, el vehículo que estaba aparcado al lado de esos contenedores. El coche, propiedad de un residente en la zona, ardió sobre todo en la parte de atrás, y el fuego afectó asimismo al interior del vehículo. También ardieron las dos ruedas traseras como consecuencia de este acto de vandalismo.

La quema de estos dos contenedores, cuyos restos fueron retiraros posteriormente por el servicio municipal de limpieza, es la tercera que se produce en poco más de una semana. Las dos anteriores tuvieron lugar en las calles Federico Tapia y Rey Abdullah, según precisaban este domingo en el programa Voces de A Coruña, de Radio Voz.

Si en este caso el vandalismo ha causado importantes daños en bienes públicos, como son los contenedores, y en los privados, como es un vehículo que quedó casi inutilizable, en otras ocasiones estos actos afectan solo a bienes públicos, sobre todo mobiliario urbano. Es lo que ocurre con las agujas del reloj floral en los jardines de Méndez Núñez, que en este mes ya han resultado dañadas en dos ocasiones, sin que la instalación de una cámara de vigilancia delante del mismo haga desistir a los vándalos de sus acciones.

En la senda del vandalismo están también las incontables pintadas que pueden verse por toda la ciudad y que afectan tanto a un inmueble de la Falperra, donde la parte baja de la fachada ha sido utilizada por un grafitero para recoger alusiones al Dépor, como, por ejemplo, a las que casi rodean la sede de la Fundación Luis Seoane y, ya puestos, siguen por la parte posterior del Museo Militar, frente a los restos centenarios del convento de San Francisco.

Multas de hasta 4.320 euros

Las multas que la legislación vigente establece para los grafiteros, que en el caso de A Coruña prácticamente no se han aplicado, van de los 100 a los 600 euros cuando se trata de una sanción administrativa motivada por un delito leve, tal y como explicaba el pasado domingo en este diario Sofía Vázquez en su Crónica económica. En el caso de que la acción del grafitero cause daños superiores a 400 euros, como que el importe de la limpieza de sus pintadas supere dicha cantidad, el acto puede pasar a ser considerado como un delito de daños, con lo cual la multa que se le impondría, en el caso de ser castigado por su acción, podría estar entre los seis meses (multa de 1.080 euros) y los 24 (4.320 euros). Reconocen los juristas que en estos casos la diferencia entre el delito leve y la sanción administrativa no está muy clara en una legislación que, además, se aplica en muy contadas ocasiones.

Otras veces, los actos vandálicos acaban con la rotura o el deterioro del mobiliario urbano, siendo actualmente un ejemplo claro la plaza de Santa Catalina, muy descuidada.