María Fernández: «El 90 % de las personas no llevan la vida que querrían llevar»

María Fernández te coloca a una lectura de cambiar tu vida. Esta coruñesa afincada en Madrid ha regresado a su ciudad natal para presentar su primera obra, El pequeño libro que hará grande tu vida (Alienta Editorial).

-¿En serio que un libro puede hacer que nuestra vida sea mejor?

-Sí. Este libro es casi como un proceso de coaching. Te invita a reflexionar sobre qué es para ti una vida grande y de qué lastres necesitas desapegarte.

-¿El runrún mental es lo que más atormenta?

-Tenemos que deshacernos de los patrones mentales que nos limitan. Hablo de miedos, conflictos interiores... En definitiva, autosabotajes que nos hacemos.

-¿Una vida grande es lo mismo que una gran vida?

-Tendrás una vida grande cuando seas capaz de pensar en grande. Y este libro te permite dar un giro de 180 grados en tu vida.

-¿Cuál es el objetivo, ser feliz?

-Vivir como siempre anhelaste. El 90 % de las personas no llevan la vida que querrían llevar.

-¿Qué debemos preguntarnos?

-¿Tengo la vida que quiero llevar? ¿He sido fiel a mis sueños? ¿He dado el 100 %? Hay muchas.

-Y después, ¿qué?

-Elige solo un objetivo, pero aquel que iluminaría tu vida. El principal motivo por el que no alcanzamos lo que queremos es porque no sabemos lo que queremos. Parece una perogrullada, pero es así. O lo supimos, pero perdimos el foco. La verdad es que el día a día nos come.

-¿Ponerse objetivos en la vida nos los coloca más cerca?

-Si los colocamos en positivo, sí. Nuestro cerebro no percibe las negaciones, pero sí la orden. No es «no quiero estar así de gordo» o «no quiero seguir con esta pareja», pero sí «quiero adelgazar equis kilos en tantos meses» o «me gustaría trabajar en estas empresas en estos puestos de trabajo». Y, a partir de ahí, hay que poner todos los recursos y toda la energía para conseguirlo.

-Ni con una varita mágica, oiga.

-Una pregunta interesantísima es: ¿Qué harías si no te importase el juicio de los demás?

-¿Usted logró cambiar su vida?

-No tendría ningún tipo de legitimidad si no me hubiera arriesgado previamente. Yo trabajaba en el sector del turismo cuando decidí dejarlo todo para apostar por el coaching. Dejé un trabajo fijo con un buen sueldo, me fui del país en el que residía, dejé a mis amigos, vendí mi coche y regresé a mi país natal para dedicarme a algo, en plena crisis, por lo que nadie todavía apostaba en serio.

-Pero le salió bien.

-Sí. ¡Y eso que después han surgido coachs como setas! [Risas].

Estudios: Obradoiro, Dominicos y el instituto de Perillo. Estudió Turismo y en la Escuela Europea de «Coaching» en Madrid.

Trabajo. Entrenadora mental y experta en desarrollo personal.

Un momento feliz: «El día que me llegó el libro a casa».

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