«No solo puedes tener una vida normal, sino ir más allá»

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

Sus éxitos y su afán de superación avalan al Premio UDC Deportes, que se entrega hoy en el Aula de Náutica

15 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El esfuerzo de la Universidade da Coruña por la divulgación académica y de valores personales tiene en Alberto Seoane (A Coruña, 1987) un ejemplo. Ahora es el deportista paralímpico el que acumula lecciones vitales, lo que le ha hecho acreedor del premio UDC Deportes. El galardón se entrega hoy el Aula de Náutica (dique Barrié de la Maza) a partir de las ocho y media de la tarde, dentro de un acto en el que se reconoce el deporte universitario, en el que participan, en todas sus disciplinas, más de 5.000 estudiantes.

-¿Cómo se encuentra?

-En uno de los mejores momentos de mi carrera. Desde que di el salto de calidad en el 2013 llegaron el Mundial, los Juegos Olímpicos y torneos internacionales con resultados muy positivos.

-¿Aspira a más?

-Cuando decides dedicarte por entero al deporte, los objetivos son altos. En caso contrario, habría que orientar la vida de otro modo. Los resultados son el objetivo y he rozado las medallas en los grandes campeonatos.

-¿Podrá salvar esa distancia?

-El objetivo son las medallas individuales en el Mundial y en los Juegos de Tokio, donde también intentaré sumar medalla por equipos. Me falta ese paso. La distancia es mínima.

-¿Cómo se salva?

-Primero, perdiendo partidos en cuartos, algo que ya he hecho y espero no volver a repetir. Además, entrenando.

-¿Todavía más horas?

-No puedo entrenar más horas ni con más calidad. Es la forma de entrenar. Me voy conociendo. Es trabajar aspectos que no trabajo, conocer mejor a los rivales, afinar.

-Usted trabaja además como gestor de cuentas de una multinacional. ¿Cómo lo lleva?

-Hay que desconectar. Yo lo hago en cuanto cojo el avión para ir a campeonatos. En el entrenamiento diario es más complicado.

-¿Compaginar es cuestión de dinero?

-En gran medida. Las becas y patrocinios son también seguridad, no depender de un resultado para comer. Porque en el deporte te vas al paro sin días trabajados ni nada. Y en tenis de mesa adaptado no hablamos de grandes cifras. Las condiciones han mejorado desde que yo empecé, aunque lentamente. Yo agradezco el apoyo de mi empresa y patrocinadores. Se ha avanzado en reconocimiento social, pero en patrocinio privado todavía queda mucho camino para poder practicar este deporte a un alto nivel.

-¿Ha evolucionado la sociedad?

-Sí. Hace años no habría reconocimiento para un deportista discapacitado. Y antes que la UDC me galardonaron en el Club Maristas (Premio a los Valores en el Deporte), y he dado charlas en la Compañía de María. Es importante que los jóvenes discapacitados pierdan el miedo.

-¿Lo tuvo usted?

-Nunca, pero soy consciente de que puede ser duro para otras personas. Y lo que quiero transmitir es que no solo puedes tener una vida normal, sino que te puedes plantear retos más allá, como el éxito deportivo de alto nivel. Se encontrarán un montón de obstáculos, pero que sigan adelante, que no se desanimen.

«Este reconocimiento es un orgullo»

El premio UDC Deportes le satisface como pocos éxitos a lo largo de su carrera deportiva.

-¿Se lo esperaba?

-Para nada. Y eso que el año pasado obtuve una mención, junto a las jugadoras olímpicas del CRAT, que ya me hizo ilusión. Este reconocimiento es un orgullo diferente al de un éxito deportivo, en el que piensas: «Yo lo he conseguido». Ahora me siento un representante de valores y es de agradecer que aprecien el esfuerzo de haber tenido que emigrar.

-¿Presume del premio?

-Bueno... es que aquí no puedes presumir de mucho, porque a un lado tienes a Carreño, al otro a Ona Carbonell, al otro a Mireia Belmonte... pero en cuanto tengo oportunidad, lo hago, je, je...

-¿Se siente unido a A Coruña?

-Y a la UDC. Estudié cuando estaba en el Club del Mar y en el CAR de Sant Cugat. Y fui a campeonatos con la UDC. No es como en Estados Unidos, pero hay mucho nivel en el deporte universitario español.

-Tendrá que decir unas palabras.

-Aún las estoy definiendo. Serán de agradecimiento, seguro.