El ático del afín a la Marea no tiene la superficie que exigía el concurso

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

El croquis. El expediente de valoración del ático incluye esta planta, en la que se ha escrito a mano la distribución de los espacios de la vivienda bajo los de la oficina. El croquis detalla la superficie construida de las estancias, pero no la superficie útil, que es inferior y la que se utilizaba en las bases del concurso
El croquis. El expediente de valoración del ático incluye esta planta, en la que se ha escrito a mano la distribución de los espacios de la vivienda bajo los de la oficina. El croquis detalla la superficie construida de las estancias, pero no la superficie útil, que es inferior y la que se utilizaba en las bases del concurso

La oficina mide 47,2 metros útiles pero las bases del proceso exigían al menos 50

15 feb 2018 . Actualizado a las 19:45 h.

Las medidas del local comercial que el Ayuntamiento compró a un firmante del manifiesto de la Marea no coinciden con las exigencias de las bases del concurso público en el que fue elegido. La condición número 10 de ese documento exigía que los inmuebles tuviesen «una superficie útil mínima de (...) 50 m2 en el supuesto de viviendas de dos dormitorios». El ático en cuestión tiene dos dormitorios, según el informe de valoración municipal, pero su superficie útil es de 47,2 metros cuadrados, según su inscripción registral, las escrituras de propiedad, y el informe de la empresa encargada de tasarlo.

Tampoco coinciden las medidas de las habitaciones. Según las bases, «la superficie útil mínima de los dormitorios individuales será de 6 m2, con uno principal no inferior a 8 m2». El informe de valoración municipal detalla las medidas de los dos dormitorios existentes: 7,32 m2 y 7,28 m2, por lo que ninguno de ellos llegaría a los 8 metros exigidos al principal. Los tendría si fuese superficie construida (la que aparece en el croquis), y no útil (la que fijan las bases).

Todos esos datos figuran en la documentación del expediente que el gobierno local facilitó ayer a los partidos de la oposición, después de que el pleno aprobase una propuesta del PP exigiendo explicaciones sobre el proceso, pero las discrepancias entre las medidas del inmueble y las bases no se mencionan en ningún punto de la documentación.

La compra del ático ha sido polémica por diversos motivos. El principal es que el gobierno local lo compró a través de un concurso para «la adquisición de edificios y viviendas» con la finalidad de dedicarlos a uso social; pero el ático no es una vivienda, sino que está inscrito en el catastro y en el registro de la propiedad como «oficinas» y «local comercial».

La empresa contratada por el Ayuntamiento para tasar las propiedades que se presentaron al concurso señalaba en su informe que el inmueble «no cumple la actual normativa urbanística», y lo describía como «oficina habilitada como vivienda en última planta de edificio». En concreto, un cuarto sin ascensor en la calle Joaquín Martín Martínez, por el que el Ayuntamiento pagó 54.575 euros. Es posible que se encarezca. Los funcionarios ya han solicitado a la comunidad de vecinos información sobre el coste de instalación del ascensor. Les han remitido tres presupuestos de abril del 2017 que oscilan entre los 72.820 y los 78.558 euros. Además, el Ayuntamiento tendrá que abonar los gastos del cambio de uso del inmueble, ya que no es posible utilizarlo como vivienda -a pesar de que ya esté habilitado así- mientras no esté registrado como tal y se haya adaptado al código de edificación vigente. En la documentación entregada no se detalla cuánto costaría esa operación ni si es técnicamente posible.

Además del ático, el Ayuntamiento compró al firmante del manifiesto de la Marea, al que en el pasado reconoció su colaboración para organizar el partido, un tercer piso en la calle Santander por el que pagó 91.290 euros.

El PP afirma que la compra es nula y el PSOE exige que se reúna la comisión de Urbanismo

La portavoz del PP, Rosa Gallego, que ayer pudo revisar el expediente de compra tras pedirlo la semana pasada, señaló que la compra del inmueble es nula porque el ático es «jurídicamente un local comercial y físicamente una vivienda ilegal, no hay por donde cogerlo».

El portavoz del PSOE, José Manuel García, exigirá a la Marea que dé explicaciones en la comisión de Urbanismo, de forma que el secretario municipal levante acta. Tanto él como el edil José Manuel Dapena, que vio el expediente, destacaron la aparente laxitud del proceso mientras que otras veces «se exigen todo tipo de garantías» a los ciudadanos.

Varela defiende la adquisición

El edil de Urbanismo, Xiao Varela, afirmó en una radio que el ático «non era un local comercial, o que estaba era escriturado como local comercial, era unha vivenda que estaba en situación irregular». Esa afirmación contrasta con la licencia de construcción del edificio, incluida en el expediente municipal, que en esa planta del edificio solo preveía usos de «local comercial». Varela añadió que las bases del concurso admitían la posibilidad de «regularizar ese tipo de situacións». Las bases dicen que «las viviendas no podrán estar incursas en ningún supuesto de infracción urbanística no legalizable».

El BNG lo ve todo correcto

También en una entrevista radiofónica, la portavoz del BNG, Avia Veira, afirmó que se trata de «unha vivenda normal e corrente» y consideró suficientes las explicaciones que le ha facilitado el gobierno de la Marea.