
Diversos medios venezolanos aseguraron que desde el colegio coruñés había protagonizado un gesto solidario con el país a través de sus disfraces, algo que rechazan rotundamente desde el colegio
12 feb 2018 . Actualizado a las 17:41 h.El carnaval de este año en el CEIP Curros Enríquez ha sido el más internacional que han celebrado hasta la fecha. No solo por la decisión del colegio de disfrazar a los alumnos de diferentes países de Latinoamérica sino también por el alcance que ha tenido esta decisión.
Las imágenes de los niños vestidos con las banderas de Venezuela han ido pasando de móvil en móvil desde el patio del colegio de Monte Alto hasta aterrizar en el otro lado del Atlántico, y a lo largo de ese periplo las instantáneas han adquirido además una significación que no tenían en tierras coruñesas.
A lo largo del domingo, diversos medios y usuarios de Twitter de Venezuela publicaron varias fotografías de estos pequeños, a los llegaron a calificar de superhéroes venezolanos, e incluso aseguraron que se trataba de un gesto de solidaridad y homenaje hacia la situación que está atravesando el país a todos los niveles.
Pero no. No había nada de protesta o reivindicación en la celebración del carnaval del Curros Enríquez. «Es una auténtica absurdez. No hubo ninguna lectura de ningún manifiesto ni se dijo nada en alusión a Venezuela», asegura el director del centro, Antonio Leonardo Pastor, quien se muestra sorprendido del alcance y la distorsión que ha tenido el festejo.