Un hombre se enfrenta a 3 años y medio de cárcel por comprar una pizza con un billete falso

alberto mahía A CORUÑA / LA VOZ

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VISTAS DE LA ANTIGUA FÁBRICA DE TABACOS Y ACTUAL AUDIENCIA PROVINCIAL DE A CORUÑA. JUZGADOS
VISTAS DE LA ANTIGUA FÁBRICA DE TABACOS Y ACTUAL AUDIENCIA PROVINCIAL DE A CORUÑA. JUZGADOS MARCOS MÍGUEZ

La Fiscalía lo acusa de hacer un pedido a domicilio por un valor de 11 euros y pagar con moneda ilegal

12 dic 2017 . Actualizado a las 21:15 h.

Un hombre iba a ser juzgado ayer en la sección primera de la Audiencia Provincial por un delito de falsificación de moneda y otro de estafa. La Fiscalía pedía para el procesado una pena de tres años y medio de prisión. Finalmente, el juicio no se celebró y se aplazó para el próximo año.

Según la acusación pública, este hombre decidió a las 9 de la noche del 10 de marzo del 2016 pedir una pizza a su domicilio y pagarla, supuestamente, con uno de los billetes de 50 euros falsos que tenía en su poder. Eligió una que tenía un precio de 11 euros. De las pequeñas y más baratas. Se supone que el acusado, aparte de matar el hambre, quería hacerse con dinero de curso legal.

En un principio, lo consiguió. Un repartidor llegó a su domicilio, le entregó la pizza y recibió el billete de 50 sin desconfianza. Le devolvió 39 euros y regresó al establecimiento. Cuando el joven repartidor entregó el billete que le habían dado, se dio cuenta de que no era de curso legal. La falsificación no estaba bien hecha y un mínimo de atención servía para darse cuenta de ello. Lo que hizo fue llamar a la policía, que acudió al restaurante para comprobar si el billete era ilegal. Una vez confirmado, acudieron al domicilio del acusado. Ya no estaba en casa, pero se encontraba cerca, en una calle próxima.

Detención

Los agentes procedieron a su detención y al registrarlo le ocuparon otros tres papeles impresos que aparentaban ser billetes de 50 euros. «El acusado poseía dichos papeles con pleno conocimiento de no ser verdaderos y con la finalidad de entregarlos a terceras personas», sostiene la Fiscalía.

También llevaba encima los 39 euros que le había devuelto el repartido, a quien se los reintegraron.