Críticas por el deterioro y la ubicación de los pasos de cebra

Emiliano mOUZO A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Los vecinos también se quejan por la situación de algunas sendas con escasa visibilidad para el peatón y el conductor

09 abr 2017 . Actualizado a las 21:14 h.

El estado de los pasos de peatones de la ciudad ha despertado quejas relativas a su ubicación y mantenimiento. Los tres atropellos, uno de ellos mortal, ocurridos esta semana a pocos metros de pasos de cebra, han reactivado además las llamadas a la precaución para que los peatones hagan uso de las zonas acotadas para cruzar.

EDUARDO PEREZ

Hace ya una década, cuando se contabilizaron en un solo año 152 peatones heridos, la sensibilidad fue en aumento ante unas estadísticas que reflejaban que cada dos días se producía un atropello en la ciudad. A partir de ese momento los responsables municipales, con el concejal Florencio Cardador a la cabeza, comenzaron a adoptar medidas para frenar aquel negro balance. La iniciativa consistía en colocar señales luminosas en los pasos de cebra de las vías más transitadas, y también en las denominadas zonas 30 y 50. Incluso se realizó un ensayo en la avenida de Oza incrustando luces led en el asfalto de los pasos de peatones.

E. P.

El programa diseñado dio sus frutos y logró reducir los atropellos y los heridos por este tipo de accidente. «Sin embargo, el proyecto quedó a medio camino y no se llegaron a iluminar la totalidad de los más de 2.300 pasos de cebra que hay en la ciudad», indica el exconcejal socialista.

En la actualidad, los coruñeses no solamente se quejan de la ubicación de las zonas para cruzar, sino también de la falta de iluminación y mantenimiento de los pasos de cebra: «Ahora es que muchos ya están sin pintar», señalan. En esta situación se encuentran gran número en el paseo marítimo, sobre todo desde el Club del Mar hasta el Acuario. En una de las rondas más extensas de la ciudad, la de Outeiro, la mayoría de las áreas para cruzar están deterioradas, «sobre todo desde donde estaban los multicines Chaplin hasta la avenida del Ejército», comenta el taxista Luis González.

Ángel Manso

Andrés Gómez, hostelero de Os Mallos, asegura que «a excepción de los pasos que fueron repintados hace casi dos años, los demás ya ni existen». Y lo mismo ocurre con los que se ubican en el final de las calles que desde Eirís y el Castrillón desembocan en la avenida de Monelos.

Mal situados

Además del deterioro del pintado, muchos vecinos se quejan de la ubicación de muchos pasos de cebra «que ponen en serio riesgo la vida de los peatones y de los conductores». Citan los existentes debajo del viaducto de la avenida del Ejército en la confluencia con la ronda de Outeiro: «Los muros del puente no permiten la visibilidad», cuenta el taxista González. Lo mismo ocurre en los de Casablanca, en el viaducto del Puerto, y también tachan de peligroso el de la bajada desde el Fernando Wirtz hacia Cuatro Caminos.