Todas esas teorías han provocado duras críticas por parte de la comunidad científica. Algunos se echan las manos a la cabeza y advierten sobre el peligro que puede suponer para algunos enfermos abandonar los tratamientos convencionales aferrándose a la esperanza que ofrece este seudocientífico con unas alternativas que, como dicen, carecen de soporte científico alguno.
Es lo que indica, por ejemplo, el profesor de la UDC y miembro de Círculo Escéptico, Manuel Herredor. Por eso, dice que hay que promover el pensamiento crítico para que la gente sepa ver los peligros que puede conllevar aplicar terapias alternativas que carecen de cualquier base científica. En esa línea habla también el decano de la Facultad de Ciencias de la institución coruñesa, Moisés Canle, que explica que este agricultor suele disfrazar sus remedios seudocientíficos en charlas sobre agricultura ecológica.