La pugna interna del PSOE hace extraños compañeros de mesa

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

PACO RODRÍGUEZ

Las primarias y el choque entre Pedro Sánchez y Susana Díaz trastocan todo el mapa de alianzas

27 may 2016 . Actualizado a las 10:45 h.

Dicen que «ojalá vivas tiempos interesantes» es una maldición china que pretende privar a la víctima de los beneficios de la estabilidad. El PSOE coruñés vive tiempos interesantes, el tiempo dirá si son una maldición o todo lo contrario, en los que se están rompiendo viejas alianzas que se mantuvieron durante años y se están forjando otras nuevas cuya solidez es una incógnita.

Los motivos de esos movimientos son múltiples. En parte obedecen a causas internas de la agrupación coruñesa, pero también están relacionados con las primarias para elegir candidato a la Xunta, el colapso del liderazgo de José Ramón Gómez Besteiro y, en última instancia, con la pugna -ahora interrumpida por la tregua de las elecciones generales- que mantienen Pedro Sánchez y Susana Díaz para controlar el partido a nivel nacional.

La división más evidente se ha escenificado estos días, en plena campaña de las primarias, dentro del grupo municipal. Por una parte, la corriente oficial que encabeza la secretaria general Mar Barcón está respaldando la candidatura del exconselleiro y exconcejal José Luis Méndez Romeu. Por otra parte, la edila Yoya Neira es una de las grandes valedoras de Xoaquín Fernández Leiceaga, rival directo de Méndez.

Neira, junto a la también concejala Silvia Longueira, ha sido uno de los principales apoyos internos de Barcón durante los últimos años. Pero se distanciaron -de hecho Neira dejó la ejecutiva local a principios de año- tras el nombramiento como portavoz de José Manuel Dapena, y por el cada vez mayor protagonismo de José Manuel García, un independiente fichado por Barcón que defendió con éxito la postura del PSOE en asuntos como los presupuestos de este año.

Neira, como Leiceaga, defiende una línea de mayor proximidad con las Mareas, y salió en defensa de la presidenta de la gestora gallega, Pilar Cancela, cuando vaticinó pactos con ellos tras las autonómicas. Barcón criticó esas declaraciones y, como Dapena, está muy lejos de defender la gestión del alcalde Xulio Ferreiro, que no pierde ocasión de recordar esas distintas sensibilidades. La postura de Barcón coincide con la de Méndez Romeu y con la de su gran valedor en Galicia, el alcalde de Vigo Abel Caballero, que ha volcado el enorme peso político de su mayoría absoluta para reorganizar el PSdeG en una línea menos pactista.

Si se asciende por el confuso árbol de alianzas, a través de Leiceaga y Pilar Cancela se llegaría a Pedro Sánchez. De hecho, la presidenta de la gestora gallega fue mano derecha del exsecretario general gallego José Ramón Gómez Besteiro, uno de los principales adalides del madrileño. Enfrente está la línea que terminaría en Susana Díaz, que mantiene contactos con responsables gallegos y coruñeses, y ha sido elogiada por figuras como Francisco Vázquez, otro de los respaldos de Méndez Romeu.

El exconselleiro es una rara avis. No tiene un «sector» propio. Fue hombre de confianza de Touriño, Pachi Vázquez y Besteiro, sobreviviéndoles a todos. Fue un antiguo rival de Barcón, y el apoyo de la concejala coruñesa -otra superviviente- sorprendió a parte de la militancia coruñesa. Pero esa nueva alianza dista mucho de ser la única entre viejos contendientes que se ha visto estos días. Neira, por ejemplo, recoge avales para un candidato, Leiceaga, al que también respalda el sector del expresidente de la Diputación Salvador Fernández Moreda, al que lleva años enfrentada. Es más, el respaldo de la dirección provincial a Xocas ha sorprendido tanto o más que el tándem Barcón-Romeu. Un veterano militante señala que parte de ellos no podían «ni ver» a Leiceaga hace apenas unos años: «Hasta hablaban de expulsarle del partido», recuerdan.