Ayer se celebró el funeral por Javier Pérez-Cepeda Vila, fallecido el pasado miércoles
04 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La iglesia de Santa Lucía se llenó en la tarde de ayer con motivo del funeral por Javier Pérez-Cepeda Vila, arquitecto, tuitero y coleccionista de amigos que falleció con tan solo 52 años en la mañana del pasado miércoles.
Curro, como era conocido, era un «clásico de la plaza de Vigo», según lo definen algunos allegados, había sufrido recientemente una afección cardíaca que lo mantuvo hospitalizado unos días y de la que se estaba recuperando. Pero hace dos días falleció y la noticia no tardó en correr por todo el barrio del Ensanche, donde era especialmente conocido y apreciado.
Hijo del que fue alcalde de la ciudad y presidente del Deportivo, José Luis Pérez-Cepeda, y hermano del decano del Ilustre Colegio de Abogados, Augusto Pérez-Cepeda, Curro era conocido por su bonhomía e ingenio, que volcaba diariamente en las redes sociales. Es precisamente de su nick en Twitter, @cchurruca, de donde salió el apodo con el que en estos últimos días infinidad de amigos y seguidores de su cuenta se despedían de él en un mar de halagos y reconocimientos.
En diversos blogs y cuentas de Twitter sus amigos han colgado estos últimos días algunas de las frases que le hicieron acreedor de miles de seguidores en las redes sociales, siempre cargadas de una retranca que era marca de la casa.