Basilea bien vale un liderato

Iván Antelo A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

MARCOS MÍGUEZ

El Liceo quiere ascender mañana a la primera plaza en la Liga Europa

06 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Hockey Club Liceo busca mañana (20 horas) ascender a la primera plaza de su grupo (el D) de la Liga Europea. El equipo que prepara Carlos Gil visita al Basilea en la segunda jornada de la máxima competición europea, en teoría el rival más asequible del grupo. Una hora más tarde arrancará el duelo entre los otros dos rivales de la primera fase: Viareggio-Oliveirense, en territorio transalpino.

Los verdiblancos intentarán repetir las buenas sensaciones mostradas en la primera jornada, en la que golearon a un Viareggio (7-2) que tan solo maquilló el marcador en los compases finales. Una actuación destacada que, sin embargo, no le ha valido para ser líder ya que el Oliveirense derrotó por 10-5 al Basilea y los portugueses tienen mejor golaveraje general.

El cuadro coruñés llega a este envite con las pilas cargadas después de la buena imagen mostrada en la Supercopa de España, en donde el Liceo derrotó al anfitrión Vic en las semifinales y solo hincó la rodilla con el Barcelona en una apretada final (con 5-5 desperdició un penalti y dos minutos de superioridad numérica para acabar encajando el gol de la derrota en una contra en los minutos finales).

Además, la Supercopa también dejó la buena noticia de que Carlos Gil ya tiene a todos sus efectivos a disposición, después de la recuperación de David Torres, que se había perdido el duelo europeo contra el Viareggio y la última jornada de Liga disputada contra el Cerceda en Riazor. El jugador coruñés demostró en la final a cuatro de Vic que está llamado a ser uno de los importantes del equipo verdiblanco durante esta temporada.

Precisamente por la celebración de la jornada europea, la Federación Española de Patinaje ha traslado los encuentros de este fin de semana de la OK Liga para el martes próximo. Una vez celebrado el duelo de Basilea, el Liceo deberá jugar tres días después en el complicado feudo del Voltregá (21 horas).