La asociación ecologista Arco Iris, a través de su abogado, Manuel Meiriño Sánchez, presentó ayer una denuncia ante el Fiscal Jefe de Medio Ambiente de Galicia, Álvaro Ortiz, «para que intervenga contra los responsables de las descargas de graneles sólidos en el puerto coruñés». Consideran que la forma de actuar de la Autoridad Portuaria y las estibadoras «puede constituir un delito contra la salud pública y el medio ambiente».
El escrito recoge que el presidente del Puerto, Enrique Losada, «permite que la manipulación de los graneles sólidos en los muelles petroleros de San Diego, se haga sin ningún tipo de control, poniendo en peligro la salud de los coruñeses y, sobre todo, la de los residentes en los Castros y el Castrillón».
También denuncian que las medidas preventivas puestas en marcha por anteriores presidentes del Puerto, «circuitos cerrados, furgón de lavado para el carbón, retirada del coque o lavado regular del suelo, no se llevan a cabo en la actualidad, y los camiones transitan sin el toldo».
Desde Arco Iris también se cree que «la emisión de partículas se disparan en ciertos días y en momentos puntuales, sobre todo con vientos superiores a 50 kilómetros por hora, que es cuando se deben paralizar los trabajos».
Desde el Puerto aseguran «cumplir la normativa vigente en materia de protección medioambiental y se dispone de los medios necesarios para evitar o minimizar las emisiones de partículas a la atmósfera, como tolvas ecológicas, el baldeo de los muelles o el regado de la mercancía, si es necesario».
Aseguran que los indicadores de emisiones demostraron que se produjeron solo 2 superaciones, «de las 35 que permite la legislación, y el equipo más próximo a las viviendas, ubicado en el parque de San Diego, no registró ninguna en el 2013», subrayan.