Miles de personas celebran en Cambre el Carnaval Pequeno

pablo barro CAMBRE / LA VOZ

A CORUÑA

EDUARDO PEREZ

La carroza de Bribesly Hills se erigió como vencedora entre las 15 que desfilaron

09 mar 2014 . Actualizado a las 12:50 h.

El buen tiempo, ausente en otros festejos carnavalescos, no quiso dejar de asistir al festival de música y color del Carnaval Pequeno de Cambre. Las carrozas y comparsas comenzaron a desfilar por el tramo que une las naves de Cela con el campo da Feira poco antes de las cinco de la tarde. Abrió el desfile la charanga Ruada con piezas entre las que no podía faltar Carnaval, Carnaval, de Georgie Dann. Bailando por detrás de ellos se podía ver a los jugadores del Barça y del Madrid, seguidos de personajes de televisión tan conocidos como José Ramón Gayoso o las hermanas Mucha e Nucha, todos ellos de la Televisión de Galicia, a la que las abuelas de la siguiente comparsa echaban la culpa del mal tiempo. Y es que si antes hablábamos de la presencia del sol, el mal tiempo también tuvo su protagonismo en forma ciclogénesis como Nadja, Okka, Petra, Ruth, Stephanie o Ulla, que volvieron a hacer acto de presencia sin mayores consecuencias. Aunque, por si acaso, Noé ya tenía preparada su arca a continuación y la había llenado de toda clase de animales, vaca incluida. No obstante, por si esta se extraviaba, había en el desfile abundante ganado, bastante joven por cierto, custodiado por los Galegauchos.

El sol apretaba y las gargantas comenzaban a secarse después de tanto cantar. Menos mal que por ahí estaban las cervezas andantes de Estrella Galicia, bien colocaditas en su caja y con abridor incluido, para refrescar el ambiente, que se había oscurecido con el paso de seres siniestros, monstruos y brujas, aunque luego iluminado por la belleza de las hadas. Llegó entonces el momento estelar de los imputados y de los políticos corruptos. Aunque eran otro tipo de enchufes los que denunciaban la subida de la luz, reflejada en lo que ellos denominan la tarifa eréctica, ya que siempre sube. La pareja formada por Alaska y Mario Vaquerizo también se dejaron ver a bordo de un descapotable, aunque para descapotable el Ferrari de Fernando Alonso y toda su cuadrilla. La Camarata Dieciochesca acalló momentáneamente los ritmos de samba para llevarnos a otra época. Por el medio un barco pesquero, el O Parrulo, con toda su tripulación a bordo y chorizos como cebo. Se ve que en el carnaval abundan.

Ya casi cerrando el desfile llegó la carroza más esperada por los cambreses. La asociación Bribesly Hills, ganadora de las últimas ediciones, convirtió su carroza en un enorme casino en el que no faltaba la presencia de «ilustres» como el agente Torrente, el exdeportivista Diego Tristán, banqueros que se jugaban en las tragaperras el dinero de las preferentes o un Elvis que no dejó de cantar en ningún momento. Y en un remolque, hasta una boda. En total, 52 figurantes. Y para cerrar el desfile más cerveza, esta vez a cargo de Cambrefest, al más puro estilo de Baviera.

Los participantes apenas tardaron una hora en cubrir todo el recorrido. Después, ya en el Campo da Feira, el humorista Pedro Brandariz procedió a dar lectura al Testamento, una tradición recuperada este año y que consiste en pequeñas crónicas que narraban en tono humorístico los sucesos acontecidos el año anterior. El desaparecido bigote del alcalde, la climatología o la ampliación de O Paraugas, entre los asuntos recogidos por el testamento de esta edición.

Premiados

La asociación Bribesly Hills volvió a vencer en el apartado de carrozas (este mismo año ganaron en Carballo un primer premio y en Arteixo dos segundos) y en la categoría de comparsas el primer premio se lo llevó el grupo Camarata Dieciochesca.