Un año para rematar la faena de las grandes obras

Xosé V. Gago / Eduardo Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

EDUARDO PEREZ

El 2014 será clave para acabar infraestructuras estratégicas e iniciar los trabajos en nuevos proyectos como la intermodal

29 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Si por una vez todos los plazos se cumplen, el 2014 quedará grabado como en el que se terminaron o se encauzaron los proyectos que A Coruña espera desde hace una década e incluso más.

En los próximos doce meses deben quedar listos el puerto exterior, su conexión por tierra con la AG-55, la ampliación de Alvedro o el párking del Parrote.

Otras grandes obras tienen que finalizar en el 2015, pero el grueso de los trabajos se desarrollará este año. Es el caso de la tercera ronda o el túnel de la Marina.

Finalmente, en el 2014 deben ponerse en marcha las obras de la fábrica de tabacos y del aparcamiento del Materno. Además de, al menos, avanzar los trámites administrativos de la futura estación intermodal o el traslado de las instalaciones de Repsol del muelle de San Diego.

Pero el 2014 será sobre todo el año en el que deben quedar rematadas o a punto de hacerlo, infraestructuras que arrastran enormes retrasos y sobre las que han puesto su mano gobiernos estatales, gallegos y locales tanto del PP como del PSOE.

La tercera ronda

El ejemplo más claro es el de la tercera ronda, una infraestructura que se remonta a los acuerdos pactados entre el exalcalde Francisco Vázquez y el desaparecido conselleiro de Política Territorial Xosé Cuíña en el año 2000. Empezó a materializarse en el 2003, de la mano del sucesor de Cuíña en ese puesto, Alberto Núñez Feijoo. El ahora presidente de la Xunta vaticinó que estaría construida a principios del 2007. Se equivocó en ocho años si los plazos actuales, que sitúan su apertura en primavera del 2015, se cumplen.

Claro que Núñez Feijoo no fue el único que anunció fechas erradas. También lo hizo su predecesor en la Xunta, Emilio Pérez Touriño, los ex ministros de Fomento socialistas José Blanco y Magdalena Álvarez, el exalcalde Javier Losada y el actual, Carlos Negreira... y algunos más.

También hay que remontarse a Cuíña para encontrar las primeras referencias a la estación intermodal. Una infraestructura que, como el metro ligero del que cada vez se habla menos, no es que se retrasase, es que nunca se empezó a construir. El actual gobierno local está intentando resucitar el proyecto, que ya tiene una fecha de entrada en funcionamiento: 2018. Veremos.

Los túneles de la Marina

El 2014 debe ser el año en el que termine la construcción del túnel del Parrote y que esté casi listo el de la Marina. Se trata de una de las obras de mayor envergadura en el centro de la ciudad de los últimos años. En el caso del Parrote, su fin dará solución al grave problema urbano que se desencadenó en el 2008, cuando la aparición de los restos de la muralla obligó a paralizar las obras del aparcamiento subterráneo que desarrollaba el gobierno bipartito PSOE-BNG.

El parón también congeló sine die la remodelación de la Marina, que el bipartito pensaba tener lista a finales del año 2010, y que el gobierno actual planea ahora ejecutar en el futuro.

Otros proyectos pasarán el 2014 en el aire. Uno de ellos es el Vial 18, que iba a quedar listo en el 2015, pero que ahora no se iniciará hasta que la tercera ronda esté finalizada.

Otro es el polígono de Morás, para el que la Xunta no ha presupuestado fondos en el 2014 al no haber demanda de suelo y que estaba destinado a ser uno de los nuevos centros empresariales de la comarca.

También se podría incluir en esta categoría el parque Ofimático. La urbanización iniciada en el 2011 y adjudicada justo antes el cambio de gobierno debía estar lista en 18 meses, pero ese plazo era una fantasía teniendo en cuenta los problemas del sector inmobiliario. Las obras avanzan, y el gobierno local ya ha anunciado que continuará mientras haya demanda de las promotoras y cooperativas, es decir el ritmo será lento pero, si hay suerte, constante.