Del ántrax enviado tras los atentados del 11-S a la carta con ricina contra Obama

La Voz

A CORUÑA

05 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El envío de cartas con sustancias químicas o tóxicas adquirió gran protagonismo a partir del año 2001, a las pocas semanas de los atentados del 11-S, cuando en Estados Unidos empezaron a registrarse envíos masivos de cartas y paquetes con ántrax. Cinco de esos envíos tenían como destino otros tantos periódicos norteamericanos. Más recientemente adquirió gran repercusión el envío de una carta con sustancias sospechosas dirigida a Barack Obama. La misiva fue interceptada ayer en el centro de filtrado de correo que funciona para el Capitolio y la Casa Blanca desde los ataques con ántrax del 2001. Los análisis preliminares detectaron que contenía ricina, un veneno.

No hay indicios de que España esté bajo la amenaza de ataques químicos masivos, pero sí puede ocurrir que alguien intente causar un daño utilizando sustancias químicas o tóxicas. Por eso, el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas elaboraron protocolos de actuación sanitaria con instrucciones y medidas concretas, como las que se tomaron ayer en la casa consistorial de Oleiros. El primero de ellos fue el de la activación de una alerta para valorar el riesgo e identificar a las personas que pudieron estar en contacto con la sustancia. El siguiente paso es la intervención de autoridades sanitarias. Ayer en Oleiros eso no fue necesario.