Un nuevo camino, de 305 metros, permitirá conectar con Bens y Suevos
02 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Hay barrios de la ciudad donde nunca han soñado con grandes infraestructuras. Nostián es uno de ellos. A menos de cinco kilómetros del puerto exterior, en el que solo este año se invertirán más de 70 millones de euros, los vecinos de uno de los pocos núcleos rurales que quedan en la ciudad se felicitaban ayer por la decisión del Ayuntamiento y la Xunta de acondicionar un camino de apenas 305 metros que, para ellos, es como si les pasara la tercera ronda por delante de casa. No en vano, la presidenta de la asociación de vecinos del barrio, María Luisa Barbeito, explicaba que este nuevo camino es la «saída de emerxencia» que llevan años demandando.
Vivir al lado de la refinería es lo que tiene. «Un día houbo unha explosión e cortaron a estrada de entrada, quedamos aquí atrapados, menos mal que non pasou nada», explica Barbeito, para añadir que la única alternativa con la que contaban hasta ahora era calzarse las botas y echarse a correr monte arriba, «porque isto era só unha corredoira».
«Esta é a saída que necesitabamos e que levaba tanto tempo pedida», apuntaba la presidenta vecinal en presencia del concejal de Medio Ambiente, Enrique Salvador, y la delegada territorial de la Xunta, Belén do Campo, que antes habían explicado que la obra, ejecutada por el Ayuntamiento y en la que se invertirán 40.000 euros de los fondos de Proxectos Estratéxicos de Infraestruturas no Medio Rural (PEIM), estará concluida en unas dos semanas, reduciendo a menos la mitad el plazo inicialmente previsto.
Los trabajos consisten en la limpieza de los bordes del camino, la excavación de cunetas y la pavimentación del trazado para facilitar la conservación de la pista, para lo que también se colocará una canaleta para la recogida de aguas pluviales.
Nuevas conexiones
Una vez finalizada, la nueva carretera, además de habilitar una nueva salida que dé más tranquilidad a los vecinos del barrio, permitirá mejorar su conexión con el entorno más próximo, ya que les unirá con las carreteras que se dirigen a Bens o bien a la de Suevos, sin tener que dar el rodeo habitual.
En ese sentido, el concejal de Medio Ambiente remarcó ayer la necesidad de combatir el déficit de infraestructuras que padecen las zonas periurbanas de la ciudad. «Este es un núcleo con calles angostas y esta salida va a permitir un desahogo», apuntaba Salvador, que remarcaba que estas zonas rurales «merecen el mayor de los cuidados y protección por su singularidad y tradición». No le faltarán deberes, porque los vecinos le trasladaron ayer una serie de mejoras que esperan ver atendidas en los próximos meses.