El TSXG ordena derribar un flamante edificio en el paseo marítimo al estimar, tras la denuncia de una particular, que la licencia es ilegal
14 may 2013 . Actualizado a las 14:33 h.El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia desestimó la semana pasada el recurso presentado por el Ayuntamiento, la promotora y los propietarios del número 13 de San Roque de Afuera, que intentaban anular la sentencia que obliga al derribo de este edificio de apenas diez años de edad y ubicado en una de las zonas más cotizadas de la ciudad. La razón es que la licencia no se ajusta a derecho y se descubrió a raíz de la denuncia presentada por una particular.
En Fernando Macías, con el edificio Conde de Fenosa, empezó todo igual, con una orden de demolición del TSXG porque la licencia no se ajustaba a derecho. También allí se llegó a eso por la denuncia de un particular. Y los vecinos de San Roque esperan que también lo suyo termine con el levantamiento de la orden de derribo.
Todo comenzó el 13 de diciembre del 2002, cuando el pleno municipal concedió licencia de obras para reforma en edificio en construcción. La denunciante recurrió y un año después la comisión de gobierno la desestimó. Se acudió a la Justicia y esta condenó al Ayuntamiento a que procediese a la reposición de la legalidad; si bien no se ordenó el derribo de los excesos.
El pleito llegó al Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 4, que en septiembre del año pasado acordó la demolición del edificio. Ordenó al Ayuntamiento y a Promociones San Roque de Afuera que se ocuparan del derribo y les dio un plazo de seis meses. Los demandados recurrieron al TSXG, que insiste en su derribo. Y va más allá: «La demolición alcanza a la totalidad de la edificación» y no a una parte. En el fallo se recuerda que «la licencia anulada autorizaba un edificio cuyo diseño se definía en el proyecto que avalaba; anulada esta licencia, la última, la edificación, con su actual configuración, queda sin autorización». En concreto, se habla de los vuelos de fachada y de todos los elementos que sobresalen del plano de la misma, así como el tamaño de los patios.
Fuentes del gobierno municipal expresaron ayer su malestar porque «se trata de otra herencia envenenada más del urbanismo del PSOE, ya que desde el año 2002, cuando fue anulada la licencia, los distintos alcaldes y concejales de Urbanismo no abordaron el problema». E indicaron que la asesoría jurídica municipal «está estudiando el tema priorizando la defensa del bolsillo de los coruñeses e intentando salvaguardar los intereses de los vecinos que se han visto afectados por otra chapuza socialista».