Las expropiaciones para ampliar Alfonso Molina costarán casi dos millones

Xosé Vázquez Gago
Xosé V. Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

PACO RODRÍGUEZ

El proyecto recoge la mejora de dos pasarelas peatonales y la construcción de una nueva a la altura de Pedralonga

01 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Casi dos de los 9,2 millones de euros que costará la obra de ampliación de la avenida de Alfonso Molina se utilizarán para pagar expropiaciones. La partida más gruesa, que supera los 1,5 millones, se destinará a la adquisición de 7.840 metros cuadrados de suelo urbano a 200 euros el metro. Además, está prevista la compra de otros 2.745 metros de suelo urbanizable residencial a 150 euros por metro. Finalmente, será necesario pagar algo más de 2.000 euros para adquirir 70 metros cuadrados de jardines con arbolado.

Esos son los únicos bienes que está planeado adquirir para la ampliación, que consistirá en la construcción de un cuarto carril en parte del trazado y de la mejora de varias conexiones. Los trabajos afectarán al tramo entre los puntos kilométricos 1.050 y 3.550, es decir entre la red de conexiones con la avenida de San Cristóbal y la autopista AP-9.

Los beneficios del cuarto carril

La mejora más destacada es la construcción de un cuarto carril entre los puntos kilométricos 1.050 y 2.700, justo entre las citadas conexiones a San Cristóbal y la AP-9. Ese tramo es uno de los de mayor densidad de tráfico de Alfonso Molina.

Añadir un cuarto carril ya supondría reducir la cifra de forma muy significativa, pero Fomento prevé que sea mayor. Según los cálculos del ministerio, cuando la ampliación esté terminada la tercera ronda ya estará funcionando, lo que reducirá el tráfico total en Alfonso Molina en cerca del 25 %. De esa forma, de los 48.350 vehículos diarios por carril se pasará a poco más de 27.000.

Más de 5.000 camiones

El propio Ministerio de Fomento reconoce en la documentación del proyecto que existe «evidente necesidad» de reformar la avenida debido a la importante densidad de tráfico que registra. Destaca además que unos 5.400 vehículos pesados pasan cada día por ella. Suponen el 3,75 % de todos los automóviles que la recorren cada día.

Además del cuarto carril también está planeado remodelar el enlace con Matogrande y Pocomaco, ampliar el puente sobre el acceso a ese polígono industrial y mejorar los enlaces con la avenida de San Cristóbal.

Cambios en los accesos

También está previsto reformar la mayor parte de los accesos a otras vías en todo el tramo de Alfonso Molina objeto de las obras. Se creará un carril de acceso directo a Pocomaco y otro hacia la glorieta de Matogrande. Además, se mejorarán las salidas hacia el concesionario Seat, el barrio de Elviña y el campus universitario, la iglesia parroquial de San Vicente de Elviña y la gasolinera, la Zapateira y, ya en el otro sentido de circulación, el Colegio Maristas.

Ese último acceso se separará de la entrada hacia la AP-9 con una barrera rígida. Además, en todo el tramo reformado se reducirá el arcén interior de 1,5 a 0,5 metros para facilitar la implantación del cuarto carril.

Además de mejoras para el tráfico rodado, la remodelación de Alfonso Molina también será beneficiosa para los peatones. Están previstas nuevas sendas a ambos lados de la avenida y además se construirá una nueva pasarela peatonal en Pedralonga y se demolerán y reconstruirán otras dos, la que cruza frente a la sede de Begano y la situada poco antes del edificio de Sindicatos. Según las previsiones del Ayuntamiento, el conjunto de las obras empezará en el próximo año.